Después de pedir ayuda a Hermosilla empresa de familia Abumohor se adjudicó trato directo con Junaeb por $126 mil millones

En febrero de 2019, Jaime Abumohor, director de la empresa Savisa, le pidió al entonces abogado del Ministerio del Interior que lo ayudara a conseguir un documento que no era público y que necesitaba para impugnar la decisión que declaró desierta una parte de la licitación del servicio de alimentación escolar. CIPER revisó ese proceso. Apenas dos días después de que Abumohor le pidió ayuda a Hermosilla, el entonces director de la Junaeb, Jaime Tohá, contrató por trato directo -sin concurso- a seis empresas. Una de ellas era Savisa. El monto de su contrato: $126 mil millones. Tohá había sido jefe de gabinete de su antecesor, Cristóbal Acevedo Ferrer, quien dos meses después de firmado el trato directo asumió como gerente general de Coval, el brazo financiero de los Abumohor. Junaeb informó a CIPER que investiga posibles contactos entre Hermosilla y la administración anterior que pudieran constituir ilícitos.

“Tenemos plazo hasta el 7 para impugnar y esa resolución es vital”. Ese fue el mensaje que Jaime Abumohor envió por WhatsApp, el 4 de febrero de 2019, a Luis Hermosilla, quien en esos días era asesor legal del Ministerio del Interior e integraba el gabinete del jefe de esa cartera, su amigo y socio Andrés Chadwick. Abumohor le pedía al penalista que interviniera para acceder a un documento que aún no era público y que resultaba crucial para que su empresa Salud y Vida S.A. (Savisa) pudiera seguir en carrera en una multimillonaria licitación. Solo diez días antes, el 25 de enero, la Junaeb había declarado desierta parte de la licitación pública más importante del Estado: el suministro de alimentación escolar y parvularia. Savisa había quedado fuera del proceso y Abumohor requería el documento que le pedía a Hermosilla para impugnar esa decisión.

Apenas cuatro días después de que el penalista recibió la solicitud, el 8 de febrero de 2019, Savisa se adjudicó un trato directo -sin concurso- por más de $126.334 millones (vea acá el detalle).

Tras publicar los chats entre Jaime Abumohor y Luis Hermosilla (lea acá “Director de empresa de la familia Abumohor pidió a Hermosilla obtener información de una millonaria licitación de Junaeb”), CIPER revisó el historial completo de la licitación de raciones alimentarias correspondiente al período 2019 a 2022, que contó con un presupuesto total de $699.557.540.628 (revisa acá la resolución). 

Esa licitación pública estuvo marcada por contratiempos. La Contraloría advirtió que había postulantes que no informaron sus nexos con compañías relacionadas, antecedente requerido para evitar la concentración del mercado en empresas controladas por el mismo beneficiario final. Y, además, los oferentes comenzaron a interponer denuncias unos en contra de los otros. 

El 6 de febrero, Jaime Tohá, entonces director nacional de la Junaeb, firmó una nueva resolución señalando que la búsqueda de proveedores de raciones alimentarias era una situación urgente. Aquello habilitó la asignación de tratos directos a Savisa y otras cinco empresas, incluyendo aquellas que durante la licitación fueron cuestionadas por Contraloría y la Comisión Evaluadora por omitir información de sus sociedades relacionadas.

A la empresa de los Abumohor se le asignó la entrega de las raciones alimentarias destinadas a las regiones de Arica, Tarapacá y Antofagasta. El contrato se fijó en $126.334.210.098 que debían distribuirse entre febrero de 2019 y febrero de 2022. 

Para el reportaje anterior de CIPER, Jaime Abumohor declaró que no recordaba la solicitud que realizó a Hermosilla para acceder al documento que aún no era público, aunque esa petición quedó registrada en los chats del abogado. Ahora, Abumohor fue consultado por CIPER sobre los nuevos antecedentes que indican que cuatro días después de pedir la intervención del penalista su compañía fue favorecida con un multimillonario trato directo, pero hasta el cierre de este artículo no hubo respuesta. 

Respecto a posibles gestiones indebidas dentro del proceso, el exdirector de Junaeb, Jaime Tohá, quien firmó el trato directo, señaló: “No tuve contacto con ningún representante de ninguna empresa. No conozco ni nunca he tenido contacto con el abogado Sr. Hermosilla”.

Tras la publicación del primer reportaje de CIPER sobre este tema, al interior de la Junaeb se encuentran investigando una posible intervención de Luis Hermosilla a favor de la compañía representada por Jaime Abumohor en la licitación de 2019. “En caso de detectarse hechos que pudieran ser constitutivos de delitos, vamos a poner todas las pruebas a disposición del Ministerio Público”, indicó la directora de la Junaeb, Camila Rubio.

LA RESOLUCIÓN VITAL PARA SAVISA

En octubre de 2018, Savisa era una de las 24 oferentes que pretendían quedar a cargo de la alimentación escolar y parvularia durante cuatro años. En el proceso se dividió el país en dos grandes zonas: líneas 1 y 2. La primera reunía a las regiones de Arica, Tarapacá, Antofagasta, Maule, Los Ríos, Los Lagos y una parte de la Metropolitana. La línea 2 estaba compuesta por una parte de El Maule (Talca y Curicó), otra de Los Lagos (Puerto Montt y Osorno) y otra de la Metropolitana. El 25 de enero la Junaeb adjudicó parcialmente -solo los ganadores de la Línea 2- y el 12 de febrero la Contraloría tomó de razón. 

Durante el desarrollo de la licitación, según los documentos revisados por CIPER, la Comisión Evaluadora recibió denuncias en contra de cuatro empresas que ofertaron para obtener contratos en la Línea 1: “Una vez retrotraído el proceso, las nuevas reclamaciones recibidas mediante el Sistema de Información al día 25 de enero de 2019 han dado cuenta de nuevos antecedentes eventualmente omitidos por los oferentes Salud y Vida S.A., Distribuidora de Alimentos S.A., Sociedad de Servicios de Alimentación Soser S.A. y Las Dalias S.A”, detalla la resolución 163 de la Junaeb (consulte aquí esa resolución).

Esa resolución profundizó los cuestionamientos que el 18 de enero anterior había realizado la Contraloría. En la toma de razón de la Resolución N° 39 de la Junaeb, el organismo reparó en que Aliservice, propiedad de Alberto Yapur Nicholls, omitió que sus controladores también integraban Inversiones Los Boldos Spa. 

El documento de la Contraloría estableció que la Junaeb no podía “desatender las reclamaciones presentadas al proceso de licitación, puesto que, de constatarse la veracidad de las alegaciones expuestas, necesariamente la consecuencia implicaría desestimar las ofertas de los denunciados”.

En la misma línea, la Comisión Evaluadora informó, en su resolución del 25 de enero, que se encontraba “imposibilitado de realizar un proceso de análisis completo y acabado” de los reclamos dentro de los plazos de la licitación, pues la entrega de la alimentación escolar debía estar operando el 1 de marzo. Y concluyó que, en aquel contexto, “las ofertas presentadas no resultan convenientes para los intereses de Junaeb”.  

Fue en ese escenario que Jaime Abumohor recurrió a su amistad con Luis Hermosilla. El 3 de febrero de 2019, el director de Savisa entregó los antecedentes de ese proceso al entonces abogado del Ministerio del Interior:

Abumohor: (adjunta un archivo de texto) Esa es la toma de razón por parte de La contraloría. Esa es la adjudicación por parte de Junaeb..! Los alcances son para la empresa aliservice … la primera adjudicada … no para Salud y vida..!

Hermosilla: Pero quiero verla entera.

Abumohor: No la encuentro …voy a pedir que me la manden.

Hermosilla: Ok.

Un día después, el intercambio de mensajes se reanudó. Fue entonces que le pidió la gestión:

Abumohor: Hola lucho…Me informan que el decreto 39  se filtró desde el interior de Junaeb y es un pantalllaso de un computador..Lo pedimos por ley de Transparencia hace una semana y no lo quieren entregar. Tenemos plazo hasta el 7 para impugnar y Eda redolucion es vital (sic).

Abumohor: Crees que puedas apurarla para que nos la entreguen antes de ese plazo? Copia de demanda del otro adjudicado .. Aliservice… El con alcances.

Hermosilla: Te llamé.

Abumohor: Te llamo.

El martes 5 de febrero a las 18:43 horas, Jaime Abumohor escribió a Luis Hermosilla: “Hola. Me puedes recibir?”. A los 20 minutos el abogado le indicó “te estoy llamando”.

Al día siguiente, la Junaeb autorizó, a través de la Resolución N° 222, contratar vía trato directo a las seis empresas que habían sido incluidas en el proceso de licitación inicial: Savisa, Hendaya, Dipralsa, Soser, Las Dalias y Aliservice. 

Jaime Tohá, director nacional de la época, recurrió a la Ley 19.886 y Decreto 250 para habilitar la contratación directa. Ambas normativas permiten realizar excepciones en casos de una “necesidad pública impostergable”. Es decir, asignar contratos directos en un “breve plazo” sin la obligación de recurrir a una licitación pública (revise aquí el artículo N° 8 numeral C de esa ley y artículo 10.3 de ese decreto). 

Un día después, el jueves 7 de febrero a las 13:46, Jaime Abumohor le volvió a escribir a Hermosilla: “Hola. Se te olvidó la dirección?”. 

No existen otros mensajes que confirmen si Abumohor se reunió con Hermosilla ese jueves 7 en la tarde. La pregunta del director de Savisa, fue el último chat registrado antes que Junaeb le otorgara, al día siguiente, el millonario contrato a su empresa.

CIPER consultó al entonces director nacional de Junaeb si durante aquella licitación recibió presiones o supo de gestiones irregulares para beneficiar a alguna de las empresas oferentes, a lo que Tohá respondió: “Fue una política de mi gestión no tener contacto con ninguna empresa durante los procesos licitatorios, por lo que no tuve contacto con ningún representante de ninguna empresa (…). Yo nunca me sentí presionado ni recibí algún tipo de presión directa como director”.

Tohá señaló que en el transcurso de las licitaciones públicas de la Junaeb para la alimentación escolar y parvularia, “la mayoría de las empresas usan todas las herramientas disponibles para alcanzar sus objetivos”. Respecto a si mantuvo contacto con representantes o intermediarios de Savisa, respondió: “No conozco ni nunca he tenido contacto con el abogado Sr. Hermosilla. Todas las reuniones sostenidas durante mi periodo como director de Junaeb se encuentran registradas de acuerdo por ley de lobby”. 

El 8 de febrero Junaeb le entregó a Savisa el contrato para hacerse cargo de los programas de alimentación escolar y parvularia en tres regiones de Arica, Tarapacá y Antofagasta. El número de alimentos diarios a entregar, hasta febrero de 2022, no fue consignado en el contrato y en otros documentos del proceso. Aunque una fuente cercana al servicio de alimentación escolar confirmó a CIPER que se fijó en 269.634 raciones alimentarias diarias a entregar. Por aquello, el Estado se comprometió a pagar cada año $42.111.403.366, es decir un contrato a ejecutar por $126.334.210.098.

El resto de la Línea 1 se dividió entre las otras cinco empresas: Hendaya ($32.048.048.654), Dipralsa ($129.881.727.357), Soser ($116.833.730.505), Las Dalias ($97.784.296.563) y Aliservice ($129.379.347.764).

CIPER consultó a Jaime Tohá por qué se incluyó en los tratos directos a empresas que estaban cuestionadas. El exdirector de la Junaeb señaló que no estaban inhabilitadas de acuerdo con lo establecido en la Ley de Compras y que “las denuncias decían relación con que gran parte de las empresas habían omitido datos de un aspecto solicitado en esa licitación. No los inhabilitaba para otros procesos”. 

CIPER también consultó los antecedentes a la actual administración de Junaeb, su directora nacional, Camila Rubio, respondió: “Las denuncias reveladas por CIPER, sobre contactos entre Luis Hermosilla y Jaime Abumohor, director de la empresa Salud y Vida (Savisa), nos parecen graves y nos sorprenden. Esto sucedió en 2019, bajo la administración encabezada por el exdirector Jaime Tohá. Dada la complejidad de la situación, la institución está recabando todos los antecedentes del trato directo en la cual se beneficiaron diferentes empresas. En caso de detectarse hechos que pudieran ser constitutivos de delitos, vamos a poner todas las pruebas a disposición del Ministerio Público”.

Foto referencial (Fuente: Flickr Junaeb)

DE JUNAEB A COVAL

Las conexiones entre los negocios de la familia Abumohor y la Junaeb no se reducen a los contratos para entregar el servicio de alimentación escolar de Savisa, sino que también tienen a un hombre en común: Cristóbal Acevedo Ferrer, abogado que ocupó el cargo de director de la Junaeb entre 2015 y 2017, y que dos años después llegó a ocupar el cargo de gerente general de la empresa Coval, brazo financiero de los Abumohor.  

“Me pareció un tiempo prudente para hacerlo ya que había dejado mi cargo en Junaeb más de dos años antes. Aun así, asumí labores completamente ajenas al Programa de Alimentación Escolar”, dijo Acevedo a CIPER.

Cristóbal Acevedo Ferrer asumió en septiembre de 2015, bajo el gobierno de Michelle Bachelet, como director nacional subrogante de Junaeb, cargo en el cual fue ratificado el 1 de noviembre de 2016. Renunció el 19 de abril del año siguiente para ser candidato a diputado por el Distrito N°11. En 2021 fue jefe de la campaña presidencial de Sebastián Sichel, puesto que tuvo que dejar debido a que Chilevisión y CNN revelaron que en 2009 habría emitido boletas ideológicamente falsas para que pesqueras financiaran la campaña a diputado de Sichel (entonces Sebastián Iglesias), cuando ambos formaban parte de la DC. Según su Linkedin, posteriormente fue gerente general de la consultora de comunicaciones Extend.

El 22 de abril de 2019, Acevedo Ferrer asumió la gerencia general de Coval, según consignó la memoria anual de la empresa, actualmente liderada por Jaime Abumohor. CIPER consultó a Acevedo si durante ese período se le realizaron consultas o asesoró el negocio de Savisa con la Junaeb: “Asumí como gerente general desde julio hasta diciembre de ese año. No tuve ningún tipo de relación ni contacto con la empresa Savisa durante ese período, ni previamente ni posteriormente la he tenido”. 

El exdirector de la Junaeb, Jaime Tohá Lavanderos, llegó al organismo en 2016, durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet, primero como asesor y luego como jefe de gabinete de su antecesor, Cristóbal Acevedo Ferrer, quien aún era militante DC. 

Consultado respecto de si mantuvo contacto con su exjefe durante el período de las licitaciones, Tohá señaló: “Sí conocí a Cristóbal Acevedo, fui asesor y jefe de gabinete. No tuve contacto con él como director de Junaeb”.

Por otra parte, Acevedo acotó: “Nunca tuve ningún tipo de comunicación con Jaime Tohá relativa a licitaciones ni respecto a ninguna materia vinculada a Junaeb”. 

Desde aquella contratación directa de febrero de 2019, según los registros de datos abiertos de Chilecompra, Savisa entró al top de los principales proveedores de la Junaeb. Solo en 2023 no figuró en ese ranking, ya que no logró adjudicarse la licitación del año anterior, razón por la que recurrió al Tribunal de Compras Públicas para impugnar ese proceso, sus directivos argumentan que no se cumplió con una de las bases técnicas. 

Que en 2019 más de la mitad de la licitación de raciones alimentarias se declarara desierta, marcó un hito. Ese año, según los registros de ChileCompra (2017-2024), el uso del trato directo por parte de la Junaeb aumentó al 37,7% de los montos transados en órdenes de compras emitidas. En los años siguientes, ese indicador no superó el 17,5%. Eso, hasta 2023, cuando por primera vez los montos asignados a las órdenes de compra vía trato directo (56,2%) superaron a los de los contratos adjudicados vía licitación pública (43,5%).