Lo que no se ha dicho del yerno de Pinochet
05.09.2023
Hoy nuestra principal fuente de financiamiento son nuestros socios. ¡ÚNETE a la Comunidad +CIPER!
05.09.2023
Revisa el artículo original publicado por la revista Cauce el 31.01.1984
Sorpresivamente, la pasada semana la defensa de Julio Ponce Lerou, yerno del General Pinochet, desistió de apelar la encargatoria de reo que contra su defendido dictó el juez Carlos Leonello Botacci, encargado de resolver esta ronda de querellas y contraquerellas que el país ha conocido.
Lo que sin embargo la ciudadanía ignora, es el fondo mismo del problema: los fundamentados cargos de enriquecimiento fuera de toda ponderación de Julio Ponce Lerou, que de oscuro empleado fiscal, que en 1969 pasó a convertirse en uno de los hombres más ricos del país.
Los chilenos han conocido fragmentariamente el conflicto nacido de un libelo de circulación confidencial en el cual se culpaba a Ponce de haber ejercido simultáneamente altos cargos fiscales y al mismo tiempo realizar fructuosas inversiones muchas de las cuales, al decir de sus inculpadores, tuvieron lugar aprovechando su parentesco con el Jefe del Estado.
El yerno de Pinochet acusó como instigadores del panfleto a Alfonso Podlech, ex Fiscal Militar de Temuco al abogado Ricardo Claro Valdés, quienes habrían contratado a Viviana Schnitzer, periodista hoy en Austria y casada hace poco tiempo, para que escribiera el libelo inculpatorio.
Todo esto motivó una querella de Podlech y Claro Valdés contra Ponce por injurias y luego éste último presentó una contraquerella también por injurias contenidas en el panfleto supuestamente por aquellos financiado.
El 26 de septiembre del año pasado, el juez Botacci falló en contra de Ponce y lo declaró reo. La apelación correspondiente fue levantada la semana pasada y, se dijo sin confirmación, que el yerno de Pinochet está pidiendo autorización para salir del país, de allí que prefiriera desistirse de la apelación.
Frente a todo este cuadro, nuestra reportera Mónica González viajó a Temuco para conocer los puntos de vista de Alfonso Podlech y también los de su hermano Carlos. La siguiente es la nota escrita por nuestra periodista, que seguramente producirá conmoción, pues por fin se conocerán las acusaciones concretas contra Julio Ponce.
Frente a la Plaza de Armas de Temuco, en un pequeño y cómodo departamento se encuentra la oficina del abogado Alfonso Podlech. Con ademanes enérgicos y sin alzar en ningún momento la voz imparte instrucciones a un equipo de colaboradores. Orden, precisión, limpieza. Estas características constituyen parte de su personalidad. Hay que hacer un esfuerzo para desentenderse de ese clima, que por momentos se asemeja a un mini cuartel y hacerlo entrar en materia.
Ninguna pregunta parece molestarlo. Se diría que tiene una cruzada personal por la verdad desde que el 3 de agosto una llamada telefónica desde Santiago le informó que el ingeniero y yerno del Presidente Pinochet, Julio Ponce Lerou, lo sindicaba como uno de los financistas de un panfleto anónimo sobre sus actividades comerciales. Luego vino el asedio periodístico, una querella y Podlech arremetió además emplazando a Julio Ponce con 50 preguntas que nunca han sido publicadas en forma íntegra. Las 50 preguntas aún no tienen respuesta.
“Hay que tener mucho cuidado en este asunto -dice- para no incurrir en errores. Hay distintas versiones. El panfleto que se adjuntó al proceso es el que tenemos que examinar”.
Mientras busca en sus carpetas prolijamente ordenadas, me comenta que hay otro legajo de 200 páginas cuya circulación ha sido muy confidencial. Entre sus papeles está el diario alemán “Die Welt” del 5 de enero de 1983. Allí, Francisco Baraona, hermano del ex Ministro Pablo Baraona dice: “Se critica al presidente Pinochet por el poder y la influencia que han cobrado su mujer y sus diversos familiares. Particularmente se habla de uno de sus yernos, quien gracias a su parentesco ocupa diversos puestos simultáneamente… Hace algún tiempo era un simple empleado público, posición que en Chile siempre ha sido mal pagada y a través de la cual nadie ha llegado a ser millonario”.
Mientras se pregunta en voz alta: “¿Por qué Francisco Baraona habló?”, me entrega un papel. Allí se puede leer la primera pregunta:
“En diversas entrevistas concedidas por Ud., señala que desempeñó los siguientes cargos: Director Ejecutivo de CONAF, Director o Gerente de Celulosa Arauco Constitución, Presidente de la Compañía de Teléfonos, Vice Presidente de CHILECTRA, director de SOQUIMICH, Gerente de Empresas CORFO, Presidente del Complejo Maderero Panguipulli y Gerente General de CORFO”.
“Podría desarrollar una secuencia de los cargos que desempeñó desde que ingresó hasta que se retiró de la Administración Pública (entre 1974 y 1983). ¿Podría precisar cuántos de esos cargos fueron ocupados simultáneamente? ¿Podría indicar remuneraciones y en qué forma organizaba su trabajo como funcionario público y empresario privado?”.
Uno a uno Podlech muestra los documentos que hablan de la carrera funcionaria de Julio Ponce. Interrumpo el itinerario para hablar sobre el Complejo Maderero Panguipulli que, según el panfleto, Julio Ponce habría ocupado como suyo para el talaje de sus animales y para comerciar con las reservas de madera, especialmente raulí.
Podlech replica que él no tiene confirmación sobre este asunto. Me muestra un recorte de diario. En él Javier Vargas Niello, Gerente Agropecuario del Complejo estatal de 500 mil hectáreas, desmiente que Panguipulli haya sido utilizado por Julio Ponce. Muestra documentos, entrega cifras. Podlech mueve la cabeza.
“Mucho se ha hablado de Javier Vargas. Lo concreto es que ha sido el hombre de confianza de Ponce. En esa entrevista -agrega- Vargas niega ser socio de Ponce. Yo tengo este documento que prueba lo contrario. La escritura hecha ante el Notario Rubén Galecio certifica que Vargas y Ponce constituyeron una sociedad GANADERA Y FORESTAL MARTELL LTDA. para la explotación y comercialización agrícola, ganadera y forestal, ya sea en terrenos propios o ajenos”.
“Lo que también me consta es que el señor Vargas, funcionario del Estado, compró el 23 de enero de 1981 el ‘Vivero Frutillar’, propiedad fiscal licitada en 7 millones de pesos. ¿De dónde sacó la plata el señor Vargas?”. Mientras busca papeles, Podlech comenta que además rematar 109,2 hectáreas fiscales en 7 millones de pesos le parece a lo menos cuestionable. Me entrega la escritura, allí se estipula que se entregaron 2 millones de pesos al contado y el resto en 5 cuotas anuales iguales.
El fundo PUYEHUE es uno de los terrenos más grandes que posee Julio Ponce. Se lo compró a Eugenio Provoste en 18 millones de pesos de los cuales sólo pagó 3 millones. ¿El resto? Un hábil y complicado vocabulario jurídico dejó a los Provoste incapacitados de cumplir su parte del contrato. ¿Qué pasó? Podlech me explica. Un señor Stutz compró las hectáreas que hacían el 100% del “cuerpo cierto” del fundo. Ponce exigió entonces el cuerpo cierto (el 100% del fundo). Provoste no pudo cumplir.
“Desde el punto de vista jurídico el señor Ponce tiene la razón, explica Podlech. Pero desde el punto de vista moral, ético no tiene la razón. Comprar 1.810 hectáreas por 3 millones es a lo menos injusto. El que lo ayudó a consumar todo esto fue un abogado bastante hábil: Pablo Rodríguez”.
Dos datos curiosos surgen de los documentos. Carlos Stutz, a la fecha de la compra era ejecutivo de SOQUIMICH, ingeniero forestal y dicen, compadre de Julio Ponce. Y la escritura de compra fue redactada por el abogado y Fiscal de CONAF, Armando Gutiérrez. Las dos instituciones SOQUIMICH y CONAF tenían como Presidente a Julio Ponce.
Testimonios recogidos en el lugar hablan de lo que pasa en el fundo Puyehue hoy día. “Los campesinos que por generaciones estaban en el fundo fueron notificados de desalojo por la propia Alcaldesa de Entre Lagos”. Otros hablan de las siembras… “ahora no se siembra nada. Ni siquiera a los trabajadores les deja sembrar”.
Los desplazamientos vehiculares también han cambiado el paisaje. “Llegan aquí en autos diferentes, 2 camionetas Chevrolet, una Ford, un Datsun Laurel, un Datsun 2.000, jeep sin contar los autos que usan los de seguridad. Y a veces también llegan en aviones con el escudo chileno”.
Mucho se ha hablado de los negocios de Julio Ponce en Panamá. Durante el Gobierno de la UP, Ponce trabajó allá y -según dicen- conserva muchos contactos. Se habla de que una de sus empresas sería el “CONSORCIO FORESTAL DE CHILE”. A mí no me consta -dice Podlech- y me muestra el certificado de vigencia de dicha compañía suscrito ante el Notario Arturo Carvajal el 22 de febrero de 1982 por doña Raquel Flores de Monsalves.
Curiosamente la misma señora Raquel Flores protocolizó ante el mismo Notario la Sociedad panameña ALEDO TRANSNATIONAL TRADING CORPORATION, empresa que se adjudicó el fundo TRAFUN NORTE de 18.460 hectáreas ubicado en la provincia de Valdivia, pagando 80 millones de pesos.
Mientras observo los planos del fundo pienso en los anexos del panfleto que contienen órdenes de tránsito de animales de Julio Ponce desde el fundo Trafún y recuerdo que al comenzar este tema Alfonso Podlech decía: “La mayoría de la gente sabe que en esas empresas extranjeras los verdaderos dueños titulares no aparecen”…
Continúa el paso de documentos. Toma un extracto de escritura pública. Allí se certifica que Julio Ponce junto a su hermano Eugenio constituyen la sociedad comercial COMPAÑIA DE INVERSIONES AGROFORESTAL FRAJ LIMITADA. En el panfleto también se habla de otro de los hermanos Gustavo Ponce, Ministro Consejero y representante de Prochile en Japón, también ha actuado como asesor de SOQUIMICH.
La Hacienda NUEVA ETRURIA es otra de las grandes incógnitas ligadas a Ponce Lerou. Tiene 11 mil hectáreas y fue de propiedad de la CONAF y licitado en marzo de 1983 a la Compañía de Inversiones Suizo Andina en 227 millones de pesos. Según el mapa oficial posee riquezas incalculables en maderas finas. Julio Ponce no aparece como dueño. “Lo raro es -agrega Podlech- que no siendo el dueño oficial, aparezca entregando como domicilio particular la Hacienda Nueva Etruria para un asunto legal como es la autorización que la Subsecretaría de Pesca le otorgara para el inicio de la explotación del choro zapato«, termina mientras me muestra el extracto aparecido en el Diario Oficial.
Aquí insiste Podlech habría que hacerse algunas preguntas: “¿Quiénes son realmente los suizos? ¿Por qué vendieron a tan bajo precio? La respuesta obvia es que no hubo otro comprador. Entonces ¿para qué vendieron en desmedro del Fisco?”.
Vuelve a sacar un recorte de diario. Leo, Javier Vargas dice: “el fundo QUENCHUMALAL fue de propiedad de la Caja de Empleados Públicos ahora lo compró Andrónico Luksic en un trato privado cuyos detalles desconocemos. Nada tiene que ver don Julio Ponce”. Alfonso Podlech me tiende un contrato de arriendo entre la Caja Nacional de E.E.P.P. y Periodistas representada por el General de Brigada (R) Tulio Espinoza Palma y el señor Julio Ponce Lerou como arrendatario.
“Esto no figura en el panfleto, afirma Podlech. Ese contrato testimonia que Ponce arrienda un fundo de 9 mil hectáreas (junto a los Lagos Panguipulli y Riñihue) por tan sólo 20 mil pesos. Según consta en el Rol de Impuestos Internos 208-1 de Panguipulli el avalúo fiscal en 1982 fue de 15 millones de pesos. ¿Quién habrá autorizado al General Tulio Espinoza para arrendar un bien de los imponentes en tan solo 20 mil pesos? ¿Qué dice la Contraloría General de la República sobre este arriendo cuando consta que en ese momento el señor Ponce era Gerente de CORFO?”.
“La Contraloría debió actuar, sostiene Podlech. Hay un dictamen que dice que los cargos de Director y Subdirector de la División Agrícola del SAG son incompatibles con la calidad de miembro del directorio de una sociedad comercial que se dedique al mismo rubro”.
«Lo que tampoco estaba en el panfleto, continúa Podlech, es el préstamo por 780 mil dólares que el Banco Andino de Panamá otorgó a Julio Ponce el 27 de mayo de 1983. Según las propias declaraciones de Ponce, ese préstamo serviría para pagar el fundo de Provoste, cosa que no hizo. Aquí está la copia del contrato. Véala. La garantía fue dada por 4 mil vaquillas que deben permanecer -según el contrato- en el fundo de Provoste”. La pregunta surge espontánea: ¿Y qué hizo entonces con la plata? ¿Compró las 4 mil vaquillas?
“Y hay más agrega”, mientras observa mi reacción. Saca un Diario Oficial del 18 de junio de 1983. Se consigna la formación de una nueva sociedad: INMOBILIARIA EL CUADRO LIMITADA. La sociedad está formada por la Compañía de Inversiones Agroforestales FRAJ (empresa de Julio Ponce y su hermano Eugenio) asociado a Alberto Reyes Finnley y Ramiro Soffia.
Su investigación continúa. Por la variedad de documentos y aparentemente por sus diferentes procedencias está claro que Podlech no actúa solo.
La conversación llega a su término. Me sigue rondando una inquietud. Insisto: ¿Por qué Julio Ponce decidió acusarlo públicamente a Ud. del origen de ese panfleto? Alfonso Podlech por primera vez demora en contestar. “Sería para separarme de las F.F.A.A., donde me desempeñé con el grado de teniente coronel y me retiré como Fiscal militar y donde tengo además muchos amigos y camaradas, incluyendo 8 generales en servicio activo”.
ALFONSO PODLECH: “NO TENERLE MIEDO AL MIEDO”
Hace 6 meses, desde que su nombre fue vinculado al caso Ponce Lerou, Alfonso Podlech, abogado, ex Fiscal Militar de Temuco y ex ferviente partidario del gobierno militar, decidió desentrañar la maraña económico-política más comentada y a la vez más acallada.
“CAUCE” lo buscó en Temuco y lo encontró.
CAUCE: ¿Participó Ud. directa o indirectamente en la confección del anónimo sobre los negocios del señor Julio Ponce?
R.: “Terminantemente NO. No tuve ninguna participación. No se olvide que soy militar, hombre de principios”.
CAUCE: ¿Y por qué entonces el señor Ponce lo acusó? ¿Tenía motivos?
R: “De acuerdo con diversas entrevistas que le hicieron, él se vio muy afectado al tener que renunciar a sus cargos públicos. Se vio asediado por diferentes personas cuyos nombres me dio cuando el 14 de agosto vino a verme con la intención de dar explicaciones”.
CAUCE: Pero ¿Ud. conocía algunos de los negocios del señor Ponce?
R.: “Todo el mundo acá en el Sur sabe. Toda la gente con cierto conocimiento. Pero los hechos eran dispersos. Sostener en forma fehaciente que se pudieran llevar a cabo actos irregulares a mí no me constaba ni me interesaba. Pero desde el 3 de agosto indudablemente que sí”.
CAUCE: Señor Podlech, Ud. tuvo una alternativa. Decir yo no participé en la confección de ese anónimo y ahí se acababa el problema.
R.: “Sí, pero tuve que sopesar la situación. Si hubiera sido un particular cualquiera hasta me habría reído. El problema era distinto. Yo dejé de ser Fiscal el 4 de enero de 1983. Una persona que formó parte del gobierno, que adhirió a los postulados de la Junta durante nueve años, no puede de la noche a la mañana…”.
CAUCE: Se comenta que Ud. perdió mucho dejando de ser Fiscal.
R.: “¿Qué perdí? Fui útil y fui Fiscal hasta el momento que yo creí conveniente para la institución. Económicamente me significó perder un sueldo de teniente coronel: 75 mil pesos líquidos. A cambio de eso, hoy puedo tomar todos los casos, no tengo ninguna incompatibilidad”.
CAUCE: Se insinuó también que Ud. pretendería borrar ciertos hechos en los cuales se vio involucrado siendo Fiscal militar en la zona.
R.: “Tengo la conciencia tranquila. Todo se hizo reglamentariamente, no hay nada obscuro. Si yo hubiera tenido algo que ocultar habría tratado de sumergirme, anulando mi personalidad y mi dignidad. Me habría protegido al interior de la institución, lo que sería una cobardía y contrario a la tradición militar. Hay algo más importante. Lo que estaba y está en juego es el principio de justicia. Si hay algo que está claro es que la injusticia es el germen de la rebeldía. Si hubiera tenido algo que ocultar yo me habría callado frente al caso Ponce”.
CAUCE: ¿Y qué ganó?
R.: “Gané en independencia. Me siento más íntegro. No podía permanecer en el Ejército viendo este tipo de situaciones”
CAUCE: ¿Siente que corre algún riesgo?
R.: “Hay un principio: no se le puede tener miedo al miedo. Y hay otro: nadie muere la víspera. ¿Para qué adelantarse entonces? ¿Temor a quién y de qué? Si me van a matar, me matan cualquier día. Si alguien quiere matar, mata de cualquier forma”.
CARLOS PODLECH: “EL SEÑOR PINOCHET NO SE VA A IR JAMÁS…”
Expulsado del país por el General Pinochet, en medio de la sorpresa y la consternación de sectores allegados al Gobierno, Carlos Podlech, dirigente nacional de los productores de trigo, no puede ser caracterizado hoy sino como un opositor al régimen.
Hablé con él a fin de obtener un juicio sobre esta impasse Alfonso Podlech-Julio Ponce, pero además de eso logré declaraciones que seguramente producirán verdadera conmoción en la opinión pública. Esta es la conversación.
“Los ataques que recibió mi hermano han tenido como objetivo hacerlo callar. Los escándalos que este señor ha cometido haciendo uso de su calidad de yerno del Presidente enriqueciéndose hasta límites nunca vistos en este país, han hecho reaccionar a las esferas de Gobierno para proteger de alguna manera al Presidente de la República de estas inmoralidades que también lo implican”.
CAUCE: ¿Y no habrá actuado su hermano por resentimiento luego del trato que Ud. recibiera?
R.: “En absoluto. Alfonso es un hombre totalmente apegado al derecho. Cuando yo fui expulsado él no estuvo de acuerdo en que se abusara de la ley y del derecho para cometer atrocidades como el exilio”.
CAUCE: Pero Ud. no es la primera persona que sufre atropellos…
R.: “Sí, pero todo queda más claro cuando se trata de un familiar. Además, él siempre me defendió cuando enfrenté querellas en el tiempo de Frei y Allende”.
CAUCE: Pero exilio no sufrió, ¿verdad?
R.: “Estamos hablando de gobierno democráticos. Entonces uno tenía el derecho a defensa en los Tribunales. Hoy día no hay Estado de Derecho. Eso no existe. Se hace la voluntad del General Pinochet y nada más”.
“Alfonso actúa al margen de lo que a mí me hicieron. Él fue siempre un ferviente partidario del Gobierno. Yo no. Al principio lo toleré como una cosa pasajera que no debiera haber durado más de 2 o 3 años porque el compromiso de las FF.AA. fue regresar a un régimen democrático cuanto antes. Pasó el tiempo y ellos se apernaron al poder. Cuando se dice que este Gobierno es ilegitimo, yo lo afirmo: No ha sido elegido por el pueblo”.
CAUCE: ¿Y qué pasó con el dirigente de los productores del trigo? Ud. se incorporó al Comando Nacional de Trabajadores y pocos días después se abrazó con el General Pinochet en un gesto de reconciliación…
R.: “Yo soy un dirigente gremial. Nunca he sido político. Si hoy me meto en política es porque veo que la cosa gremial ha sido sobrepasada. Muchos agricultores no tenían crédito para sembrar y ellos me pidieron que hiciera un esfuerzo, que tratara de resolver sus problemas. El agricultor que no siembra no tiene con qué comer durante el año. Me sobrepuse a mi orgullo personal y pedí una audiencia con el Presidente. Y me armaron un show”.
CAUCE: ¿No imaginó Ud. que sería pública su entrevista?
R.: “No pensé jamás. Pero el señor Pinochet acostumbra a usar a todo el mundo. Ahí estaba la TV, los periodistas. Todo armado. Entré solo, nadie esperaba y cuando ingresé a uno de los salones presidenciales lo único que veía eran periodistas, cámaras…”.
“Cuando me quedé solo con el Presidente le hablé muy claro. Nosotros como no viables prácticamente no tenemos derecho a la vida en este Gobierno. Si fueran banqueros, el Banco Central yo habría abierto sus bóvedas para llenarlo de plata. Los pequeños agricultores están totalmente abandonados a su suerte”.
CAUCE: ¿Ud. creyó que el Presidente solucionaría los problemas?
R.: “Conversamos durante una hora. A todo accedió. Después de todo el show de ese mes de julio, yo estoy consciente que me usaron. Como usan a Jarpa ¡Que no piense el señor Jarpa que va a sacar algo de este Gobierno! El señor Pinochet no se va a ir jamás. ¡Ni lo piensen! Yo que lo conozco le puedo decir que el General Pinochet no va a dejar el poder, especialmente después de lo que ha pasado en Argentina”.
CAUCE: ¿Y qué cree Ud. que va a pasar entonces?
R.: “Si no se va habrá un enfrentamiento. Se está preparando el ambiente. A mí me afectaría mucho que las FF.AA. se vieran mezcladas por defender a este Gobierno”.
CAUCE: ¿Ud. tiene mucha confianza en las FF.A.A?
R.: “Si. Yo no creo que se dejen arrastrar. No puedo decirle más”.
CAUCE: ¿Aún piensa que el Comando Nacional de Trabajadores es la estructura gremial que les da fuerza?
R: “Ellos tienen el mérito de haberse jugado por entero para provocar una respuesta masiva de repudio a este Gobierno. No se olvide sí que los primeros que protestamos fuimos los trigueros. Nosotros desafiamos al Gobierno sin tener la voluntad de hacerlo”.
“Hoy día mire como estamos. El agricultor chileno ya no está compitiendo con agricultores extranjeros sino que está compitiendo con Gobiernos extranjeros. Es realmente para la risa”.
“Nos han tratado muy mal a los agricultores. Nos tienen expuestos a un sistema de libre mercado. Se aprobó recién un nuevo crédito de 40 millones de dólares para traer trigo. ¿A quién favorece este crédito? Únicamente a los importadores que son los culpables de haber desangrado este país llevándose los dólares fuera de Chile”.
“No hay posibilidad alguna de solución dentro de este modelo económico”.
CAUCE: ¿Existe alguna posibilidad de diálogo?
R.: “No, enfáticamente NO. Es una pérdida de tiempo”.
CAUCE: ¿No iría de nuevo a La Moneda?
R: “¡Jamás! Ya me usaron una vez y será la última. ¡Nunca más! Hay un solo consenso en el país: volver a la democracia y eso pasa por que se vaya el Presidente de la República. Luego habrá que cambiar la Constitución”.
“Si el objetivo es recuperar la democracia a mí no me importa la cuestión de los partidos políticos. Después pensemos en los partidos. Hoy tenemos que unirnos todos”.