NEXOS CON EMPRESARIO CONDENADO POR FRAUDE OPACAN SU GESTIÓN EN LA ANFP
Sergio Jadue: Radiografía a los negocios e ingresos del presidente del fútbol profesional
29.01.2015
Hoy nuestra principal fuente de financiamiento son nuestros socios. ¡ÚNETE a la Comunidad +CIPER!
NEXOS CON EMPRESARIO CONDENADO POR FRAUDE OPACAN SU GESTIÓN EN LA ANFP
29.01.2015
Vea además: Entrevista a Sergio Jadue: “Preferí no hacerme la pregunta de dónde venía la plata de Serrano”
Para este viernes 30 de enero está convocado el Consejo de Presidentes de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP). Inicialmente, la cita prometía no ser más que un simple trámite que daría inicio al segundo periodo de Sergio Jadue al mando. Pero las cosas cambiaron. Desde el 28 de diciembre las aguas por las que navega el presidente del fútbol están agitadas. Ese día El Mercurio reveló que Jadue, a través de un contrato triangulado, recibió pagos de una sociedad involucrada en una millonaria estafa orquestada por Tomás Serrano Parot, empresario condenado a 15 años de cárcel en diciembre. Serrano es controlador de Unión La Calera, club que presidió Sergio Jadue antes de llegar a la ANFP.
La investigación judicial del fraude de Serrano confirmó que a Jadue le pagaba una consultora del empresario, por su trabajo en Unión La Calera. El dirigente recibió ese dinero a pesar de que el club informó a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) que su directorio no percibía remuneraciones. El expediente judicial también acreditó que Jadue gestionó la venta de un terreno de Unión La Calera y que parte de ese dinero fue a la cuenta de Serrano, cuando el empresario ya era investigado por el Ministerio Público.
Las explicaciones que ha dado Sergio Jadue (35 años) para justificar la triangulación de los pagos que recibió cuando fue directivo de Unión La Calera, han sido calificadas como insuficientes por algunos dirigentes del fútbol, quienes plantean que se aparte de su cargo hasta que se aclaren sus vínculos con los negocios fraudulentos de Tomás Serrano. Esa solicitud sería formulada en el Consejo de Presidentes de la ANFP programado para este viernes 30. Así lo han anunciado públicamente al menos dos dirigentes: Ricardo Abumohor (O’Higgins) y Miguel Nasur (Santiago Morning).
Los últimos seis años de Sergio Jadue han sido de un sorprendente ascenso vertical. Él mismo cuenta que hasta antes de asumir como dirigente del fútbol vivía de una panadería que instaló en uno de los locales comerciales de su familia materna en La Calera. El hombre que hoy participa en las decisiones de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) que mueven millones de dólares, a mediados de la década pasada miraba con ansiedad y preocupación las cuentas de su negocio al final de cada mes. La panadería partió bien, pero al tiempo las ventas flaquearon: “Era más rentable dar en arriendo el local”, comenta.
En 2007, en medio de ese periodo de altibajos financieros, entró al directorio de Unión La Calera. Desde los cargos que había ocupado como dirigente de las divisiones menores del club, Jadue se había opuesto a que La Calera fuese administrada por una sociedad anónima, pero finalmente, en esos días de incertidumbre económica, se puso a las órdenes de los nuevos controladores y al año siguiente aceptó que le hicieran un contrato por $2,7 millones mensuales.
Las particularidades de ese contrato y el historial judicial de sus empleadores, son los que hoy ensombrecen el inicio del segundo período de Sergio Jadue en la ANFP. Los $2,7 millones no se los pagaba Unión La Calera. Aunque ese dinero era una remuneración por los servicios que Jadue le prestaba al club, él fue contratado y pagado por Serrano Consultores Limitada, una sociedad del ahora encarcelado empresario Tomás Serrano Parot.
La sociedad anónima deportiva profesional (SADP) propietaria de Unión La Calera, es hasta hoy controlada por Tomás Serrano. Dueño de la corredora de bolsa Serrano McAuliffe, el empresario se apropió del dinero que invertían sus clientes en acciones y lo ocupó en sus negocios personales. La Fiscalía pudo acreditar que el monto total defraudado superó los $12 mil millones. Entre los receptores del dinero defraudado por Serrano, figuran Unión La Calera, el club Deportes Ovalle (de la Segunda División), una productora de TV, una inmobiliaria y el canal de TV Nexchannel. Fueron cerca de $760 millones los que Serrano alcanzó a inyectar en Unión La Calera.
Sergio Jadue asumió como presidente de La Calera en junio de 2009, cuando la investigación contra Tomás Serrano estaba en curso. En esa fecha, ya recibía el sueldo de $2,7 millones de Serrano Consultores. Durante su gestión encabezó la venta de un terreno del club por $400 millones, operación que contó con la venia de Serrano, quien se benefició con una parte de ese dinero. Una venta que acrecienta las sospechas de algunos dirigentes del fútbol, quienes le exigen a Jadue que transparente toda su relación con Serrano, antes de iniciar su nuevo mandato en la ANFP.
En concreto, piden que se establezca cuánto dinero recibió -y bajo qué concepto- de parte del empresario condenado y si tenía conocimiento, cuando presidió La Calera, de que los dineros que le pagaban y las sumas con que manejaba el club eran fruto de una estafa.
-Hoy existe la idea de que Jadue mintió y que, además, recibió dinero no en forma ilícita, pero sí irregular. Y él, como presidente del fútbol chileno, tiene el deber de demostrar que eso no es efectivo. O’Higgins, en el próximo Consejo de Presidentes de la ANFP, le solicitará esa demostración. Y ojalá que lo haga y que no deje dudas. De lo contrario, debería asumir las consecuencias –señaló Ricardo Abumohor, presidente de O’Higgins, a El Mercurio.
Miguel Nasur, presidente de Santiago Morning, dijo a El Mostrador: “Creo que Jadue debe colocar su cargo a disposición del Consejo de Presidentes mientras se desarrolla la investigación. Será el consejo el que, soberanamente, designe una comisión para que se haga cargo de la ANFP hasta que todo esto se aclare. Este momento es muy oportuno, pues en los próximos días Jadue debe convocar a un plenario de presidentes para dar por iniciado oficialmente su segundo período”.
A Nasur y Abumohor se sumó Marcelo Salas, presidente de Deportes Temuco. En la ceremonia que dio inicio a la gira de exhibición del trofeo de la Copa América, el “Matador” fue escueto pero duro: “Por todo lo que se ha dicho, sería normal y decente (de parte de Jadue) decir algo».
En la antesala del Consejo de Presidentes, CIPER cerró una extensa investigación sobre la relación del presidente del fútbol chileno con los negocios de Tomás Serrano, la evolución del patrimonio personal y familiar de Jadue, sus sociedades, negocios e ingresos. El martes 27 de enero, Sergio Jadue recibió a CIPER en la sede de la ANFP. Sostuvo que fue un error haber suscrito en 2008 el controversial contrato por el que ahora se le cuestiona y admitió que debió ser pagado directamente por Unión La Calera. Y afirmó que, a su juicio, no transgredió las normas que rigen al fútbol profesional, por lo que no está dispuesto a dejar su puesto de manera interina para dar espacio a una investigación.
Respecto de la investigación de CIPER sobre su patrimonio, Sergio Jadue confirmó que desde que asumió en la ANFP formó una sociedad comercial y adquirió dos nuevas propiedades, pero sostuvo que son fruto de sus ingresos, los que superan los $12 millones mensuales, suma que en más del 50% proviene de su rol como dirigente del fútbol.
Conocida la condena contra Tomás Serrano Parot, El Mercurio lanzó el primer misil contra Jadue. En un artículo desplegado en dos páginas se difundió la declaración que prestó Sergio Jadue en calidad de testigo ante el fiscal que investigó la estafa de la corredora de bolsa de Serrano. En esa declaración, fechada el 18 de noviembre de 2009, Jadue dijo:
“En junio de 2008, Cristián Zuñiga (entonces gerente de Unión La Calera) me dice que me va a hacer un contrato de trabajo, el que yo pido que no se haga a nombre del club, pues los directores no podemos recibir remuneración, por lo que se extiende a nombre de Serrano Consultores, por una remuneración mensual de $2 millones (…), encomendándome en él hacerme cargo de todos los temas deportivos del club”.
Hoy, Jadue dice no recordar si fue él quien pidió que el contrato fuera triangulado por una sociedad distinta a la de Unión La Calera. En entrevista con CIPER, admitió que, en cualquier caso, él había aceptado usar esa fórmula. Respecto de las razones que tuvo para aceptarlo, dice que “quizás fue por desconocimiento”, porque entonces suponía que estaba prohibido que los miembros del directorio de un club recibieran remuneraciones. Pero aclara que eso fue un error, ya que en 2008, cuando firmó el contrato, ya regía la ley que dio origen a las Sociedades Anónimas Deportivas Profesionales (SADP), la que permite a cada club definir en sus estatutos si sus directivos pueden o no ser pagados. En el caso de la SADP de Unión La Calera, afirma Jadue, eso estaba permitido.
– Pudiendo haberlo hecho de acuerdo a la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas, se debió haber hecho el contrato de esa manera, porque no vulneraba ningún tipo de estatuto –dijo Jadue a CIPER.
En conclusión, Jadue reconoce haber aceptado que le triangularan los pagos, porque pensaba que de esa manera estaba burlando una prohibición, a pesar de que la norma que pretendía quebrantar no existía.
La versión que dio Jadue a CIPER es contradictoria con la información oficial que entregó la SADP de Unión La Calera a la Superintendencia de Valores y Seguros en sus memorias 2008 y 2009. En ambas se informa que los miembros del directorio no recibían “remuneración alguna” por ejercer sus cargos (vea la Memoria de 2008 y la de 2009, página 11). En la Memoria de 2008, Jadue figura como director y en la de 2009, como presidente. En esos dos años recibió el sueldo que le pagaba Serrano Consultores. Es más, en octubre de 2009, según acreditó el mencionado reportaje de El Mercurio, Jadue presentó una demanda laboral por remuneraciones impagas contra la consultora de Serrano, la que ya había quebrado producto de la revelación del fraude. Ese juicio se resolvió con un dictamen favorable al actual presidente de la ANFP: el tribunal ordenó que la empresa le pagara $20,9 millones.
Los opositores a la gestión de Sergio Jadue consideran inverosímil su explicación. De allí que insistan en que debe investigarse a fondo por qué se triangularon esos pagos, más aún ahora que la justicia ha confirmado que el dinero de su empleador tenía un origen fraudulento. Las suspicacias son alimentadas, además, por las distintas versiones que ha dado Jadue respecto de los trabajos por los que le pagaba Serrano Consultores.
En su declaración de noviembre de 2009 ante la Fiscalía, Jadue dijo que en virtud del contrato que firmó con la consultora se le encomendaron “todos los temas deportivos del club”. Sin embargo, el pasado 12 de enero, Jadue asistió al programa deportivo Al aire libre, de radio Cooperativa, y modificó su versión: “Cumplía servicios judiciales para el club, yo venía saliendo de quinto año de Derecho, tenía el ius postulandis, o sea, yo podía concurrir a tribunales y había temas laborales y trabajé para ello”.
La controversia se encendió aún más por el contraste entre su declaración judicial de 2009 y la que él mismo Jadue hizo al diario La Tercera en marzo de 2011, cuando ya había asumido la presidencia de la ANFP: “Jamás he tenido una relación comercial con el señor Serrano. No estoy involucrado en ningún tipo de sociedad (con él). Es una persona que lamentablemente presenta ilícitos. Lo conocí cuando ya estaba formalizado”.
Sergio Jadue dijo a CIPER que no ve contradicción entre lo que declaró al Ministerio Público en 2009 y lo que señaló a La Tercera en 2011:
-Ante la pregunta que me hizo un periodista de La Tercera respecto de si tenía vínculos comerciales con el señor Tomás Serrano, mi respuesta fue: “No, no tengo”. Pero quizás debí haber sido más preciso y haber dicho: “No, no tengo vínculos comerciales, pero sí tuve laborales”. Aquí no hay una mentira, porque un vínculo comercial es muy distinto que uno laboral. Ciertos medios han tratado de inducir a la opinión pública de que aquí hubo una mentira y no la hay. Una relación comercial, y eso está clarito en el Código de Comercio, puede ser una sociedad o una adquisición en conjunto de algo patrimonial y eso jamás lo hubo.
Consultado por CIPER respecto de si sabía, cuando presidió Unión La Calera, que el dinero con que funcionaba el club provenía de una estafa, Sergio Jadue respondió que prefirió no hacerse esa pregunta y que, ante el riesgo de que el club desapareciera por los manejos de Serrano, sólo pensó en salvar la institución. Además, reconoció que ser presidente de Unión La Calera era su sueño y que al abrirse esa posibilidad, no dudó en asumir:
-Preferí no hacerme esa pregunta, porque aquí había dos caminos posibles: que el club desapareciera por la crisis que provocó la situación de los socios controladores o que alguien asumiera la presidencia y tratara de sacarlo adelante. Mire, yo amo a Calera. Mis abuelos fundaron Unión La Calera. Yo no quise hacerme la pregunta y decidí tomar el club. Además, era mi sueño ser presidente del club y la crisis me dio la oportunidad. Y creo que hice lo correcto: logramos salvar la situación bien nefasta que el club tenía el 2009 en materia económica y deportiva. Y al año siguiente logramos su ascenso a la Primera División, donde se mantiene hasta la fecha.
En conocimiento o no del fraude que ejecutó Tomás Serrano, lo concreto es que una de las primeras acciones que debió ejecutar Sergio Jadue cuando asumió la presidencia de Unión La Calera, fue la venta de un terreno de 12 hectáreas que pertenecía al club, operación que benefició directamente al empresario que ya estaba bajo investigación judicial. Una parte significativa del dinero que generó la venta fue destinado a tapar los forados financieros de los negocios de Tomás Serrano, y otra fue a las cuentas del empresario y de sus principales socios.
La memoria de la SADP del año 2009 señala que el club se desprendió del terreno por $400 millones. Y también indica que la operación sólo le dejó una utilidad de $233 millones. El mismo documento consigna que la venta se realizó en dos etapas: la primera se concretó el 3 de julio de ese año y la segunda el 12 de agosto, cada una por $200 millones, cuando Jadue ya había tomado el timón del club. El comprador fue el dirigente del fútbol Miguel Nasur, quien señaló a El Mostrador: “Tomás Serrano envió a Sergio (Jadue) para ofrecerme Deportes Ovalle y para unirme a La Calera”.
Efectivamente, Nasur compró Ovalle, pero rehusó sumarse a la SADP de La Calera: “Sólo adquirí en $400 millones un terreno que la directiva (de La Calera) también me estaba ofreciendo”, dijo a El Mostrador.
En la investigación que hizo la Fiscalía sobre la estafa de Serrano, quedó acreditado que el dinero recaudado por la venta del terreno se destinó al pago de deudas de otros dos negocios del ahora encarcelado empresario. También se confirmó que una parte del dinero se desvió a las cuentas de Serrano y de sus socios. Así lo declaró Luis Núñez, entonces miembro del directorio y ahora gerente general de Unión La Calera, ante el Ministerio Público:
“El dinero fue destinado a deudas del club, deudas del canal (de TV Nexchannel) y una cantidad igual a la anterior para nosotros, esto es Tomás Serrano, Jorge Fuenzalida (socio de Serrano, condenado a 11 años de cárcel) y yo”.
En esa declaración, Luis Núñez también estimó probable que Sergio Jadue haya recibido parte de ese dinero por medio de pagos realizados por Unión La Calera: “Respecto de Jadue, si recibió algo fue por La Calera, ya que necesitaba vivir”. Pero Jadue lo niega, taxativo:
-Los $400 millones en que se vendió el terreno ingresaron, completos, a Unión La Calera. En esa época yo estaba solo en el club y tendría que haberme pagado yo mismo. No, nunca. Eso es falso total. Lo que Luis Núñez declara como una eventualidad, no fue.
Sergio Jadue insistió en la entrevista con CIPER que no tuvo ni tiene ningún vínculo societario con Tomás Serrano o con alguna de sus empresas. También dijo que mientras él fue presidente de Unión La Calera nadie de su familia hizo negocios con Serrano. El Diario Oficial le da la razón. Porque la única sociedad que aparece en ese registro y que vincula a Serrano con algún familiar de Jadue es de 2013: la Inmobiliaria e Inversiones ULC SpA fue creada el 5 de abril de ese año, por Inversiones Los Acantos Limitada, de propiedad de Tomás Serrano y Bison S.A., de Francisco Sepúlveda, quien fuera abogado de Tomás Serrano. El tercer socio es Sabino Jadue Jadue, tío de Sergio Jadue. Un año más tarde, Sabino Jadue se convirtió en presidente de la sociedad anónima deportiva de Unión La Calera, cargo que aún mantiene.
Sergio Jadue “necesitaba vivir” fue lo que afirmó Luis Núñez ante la Fiscalía. Y muchos son los dirigentes e hinchas que se preguntan de qué vivió y de qué vive hoy el presidente del fútbol profesional, quien egresó sin titularse de la carrera de Derecho, la que cursó primero en la Universidad del Mar y luego en la Universidad Marítima.
El propio Jadue dice hoy a CIPER que en los años en que Unión La Calera vivió bajo el riesgo de desaparecer, él se sustentó primero con los pagos que le hizo la consultora de Tomás Serrano; luego, con el dinero que recibió por el juicio laboral; y por último, pero lo más importante, fue la mano que le tendió su familia materna. Se hizo cargo de la administración de diversos inmuebles en La Calera, que constituían la sucesión hereditaria de su abuelo: José Jalil Jadue Seguebre, quien le heredó también la pasión por Unión La Calera.
La sucesión de José Jadue, quien falleció en 1989, se liquidó recién a fines del año pasado. Los bienes inmuebles que la constituían se subdividieron entre los cinco hijos de José y su viuda, María Silvia Jadue Abuhadba. De acuerdo con los registros del Conservador de Bienes Raíces de La Calera, la herencia está conformada por dos locales comerciales y seis oficinas ubicadas en calle José Joaquín Pérez; cinco locales en calle Carrera 570 al 576 y dos en calle Carrera 556 al 566. A eso se sumaban dos casas, un cité y un local comercial, todos en la calle Caupolicán, los que fueron vendidos hace cerca de un año y medio por la familia. Según la investigación de CIPER en La Calera, los nueve locales se arriendan por montos que oscilan entre $1,5 millón y $2 millones. Las seis oficinas se alquilan en $180 mil en promedio. Esas cifras fueron confirmadas por el propio Jadue en la entrevista con CIPER.
En octubre de 2011, Sergio Jadue y su esposa, María Inés Facuse, constituyeron una sociedad comercial a través de la cual administran los locales y oficinas de la familia en La Calera. La administración de todos estos inmuebles está en manos de Marlene Jadue, quien suscribió un contrato con la sociedad de su sobrino, Sergio Jadue, por el cual le entregó la gestión de los bienes.
A través de la misma sociedad con su mujer, Jadue ha adquirido, con crédito hipotecario, un departamento en Concón y un terreno rural en La Cruz, comuna ubicada entre La Calera y Quillota. El terreno le costó $25 millones. El departamento lo arrienda por $650 mil mensuales de marzo a diciembre y en verano lo alquila por $120 mil diarios, por lo que en promedio le deja cerca de $13 millones anuales. Jadue dice que también fue aval de su madre, Gloria Jadue, en la compra de un departamento ubicado en la avenida Costanera de La Serena, propiedad que efectivamente figura a nombre de ella a partir de 2014 en el Conservador de Bienes de esa ciudad.
En el último año tributario (2013), Sergio Jadue retiró de la sociedad con su esposa unos $30 millones. Además, esa sociedad le paga un sueldo de $1,3 millón mensual como gerente general.
Sumando todos sus ingresos, Sergio Jadue dice recibir mensualmente unos $12 millones. Más del 50% de esa cifra proviene de un “viático” que le paga la Conmebol y que parte de un piso de US$10 mil dólares mensuales (equivalentes a unos $6,2 millones). En esa confederación, Jadue ocupa el asiento del segundo vicepresidente.
-Desde el 1 de enero de 2011 a la fecha, mis ingresos se componen de dos ítems principalmente. Uno son los ingresos por ser miembro del Comité Ejecutivo de la Conmebol, que son variables, además de los viáticos de FIFA y viáticos de la ANFP. Ese es un ítem importante. Y el otro, es la administración de las propiedades por la que se me paga –dijo a CIPER el presidente de la ANFP.
Jadue dice que el promedio que él ha recibido de la Conmebol es de US$10 mil: “Alguna vez podrán ser US$12 mil, pero no recuerdo bien…, son cuatro años y no recuerdo haber recibido más de US$10 mil… A US$15 mil no he llegado nunca”.
La cifra es variable y el propio dirigente explica lo que la hace subir: “La cantidad de viajes, la cantidad de representación que tú tengas para los torneos de Copa Libertadores, Sudamericana y Recopa, por ejemplo. Un año me pidieron que entregara la Copa Suruga Bank en Japón. Entonces estuve 16 días fuera. Con 16 días, lógicamente, son más viáticos”.
Aunque Jadue no entrega muchos detalles sobre cómo funciona el sistema, personeros vinculados a la Conmebol señalaron a CIPER que el dinero que entrega la confederación puede sobrepasar los US$ 15 mil y que aunque esa suma incorpora gastos de representación que se deben rendir, en los hechos los excedentes no se devuelven. Las mismas fuentes indican que los viáticos que paga FIFA son mucho menores: unos US$250 por cada día fuera del país.
Todo el mundo asume que el viático de la Conmebol es una remuneración destinada a los presidentes de cada asociación nacional, a quienes se entrega el dinero directamente.
-Ese pago no tiene nada que ver con la ANFP. Lo recibo yo, personalmente, en documentos o depósitos, cada dos o tres meses, cuando hay reuniones (en la sede de la Conmebol) –dice Jadue.
Respecto de remuneraciones en la ANFP, en 2013 se aprobó que la directiva de la asociación sea rentada, pero esa medida se adoptará recién a partir de este mes:
– La reforma se hizo bajo mi mandato y quedaba un año de presidencia, por lo que sentí que era mejor terminar el año y empezar en el próximo directorio. Si yo hubiese perdido las elecciones ahora, no hubiera recibido nada. Entonces, desde enero de este año el directorio debe percibir remuneración o dieta –afirmó Jadue a CIPER.
El monto debe definirlo en las próximas semanas una comisión del Consejo de Presidentes, la que desarrolla un estudio para establecer cuánto se paga en los directorios de empresas que manejan un presupuesto como el de la ANFP: $15 mil millones.
En el entorno de la ANFP apuestan a que las denuncias contra Sergio Jadue por sus vínculos con las sociedades de Tomás Serrano no harán mella en la imagen del presidente. Incluso, hay quienes advierten que los detractores ni siquiera se atreverán a poner en tabla el asunto.
El presidente de la ANFP cuenta con una buena línea de crédito en una hinchada a la que no le preocupa la pulcritud de los negocios del futbol si hay resultados positivos en la cancha. A ello contribuyó el buen desempeño de la selección en las últimas clasificatorias, el emotivo paso de la Roja por el Mundial de Brasil y las expectativas que despierta la Copa América. Además, Jadue consiguió para Chile la sede del Mundial Sub 17 que se juega este año.
Y de la simpatía que despierta en los clubes, ni hablar. La jugada maestra que le aseguró los votos para obtener su segundo mandato, la hizo a fines de 2013: gestionó un préstamo por un total de US$30 millones y puso ese fondo a disposición de los clubes para que salden sus deudas con las empresas de factoring, las que en los hechos, pueden llegar a controlar, por el alto nivel de endeudamiento, los votos en el Consejo de Presidentes de la ANFP. El préstamo de US$30 millones lo aportaron los Banco Penta y BBVA, y los clubes tendrán hasta 48 meses para pagar, con un interés de 0,78%.
Con ese registro es difícil que algún dirigente del fútbol se anime a enfrentar a Sergio Jadue, quien llegó al puesto encumbrado por los más importantes inversionistas del fútbol profesional, tras el round entre Harold Mayne-Nicholls y Jorge Segovia a fines de 2010. En esa crisis, la mayoría de los dirigentes quedaron inhabilitados para asumir en la ANFP por una cláusula que les impedía tener negocios con sus clubes. Y fue entonces que un joven dirigente de Unión La Calera, sin patrimonio y, por lo tanto, sin ese impedimento, saltó al ring: Sergio Jadue.
Esa relación con los grandes empresarios dueños de clubes siempre ha alimentado rumores. Se le acusa a Jadue, por ejemplo, de haber presionado a fines de 2012 a O’Higgins para que vendiera al jugador Ramón Fernández a la “U”, entonces presidida por José Yuraszeck, uno de los artífices del aterrizaje de Jadue en la ANFP. El presidente de O’Higgins, Ricardo Abumohor, dijo a CIPER que prefiere no hablar sobre ese tema. Jadue, en tanto, reconoce que llamó a Abumohor, pero dice que no lo presionó, que sólo intervino por petición de Unión La Calera, su antiguo club, que era dueño del 25% del pase del jugador y cuyos dirigentes se sentían perjudicados con la suma que O’Higgins les estaba ofreciendo:
-Llamé a Ricardo. Y ahí me equivoqué, no debería haberlo hecho. Me pasó la cuenta la inexperiencia.
Para que el Consejo de Presidentes censure al timonel de la ANFP, se requiere la aprobación de cuatro quintos de la asamblea (40 votos, de un universo de 50). Un bloque que hoy parece imposible de constituir.
-Varios presidentes de clubes me han llamado para darme todo el respaldo: Universidad de Concepción, San Luis, Lota, Copiapó, La Serena, Coquimbo, Wanderers y Everton. Conversé con el presidente de Colo Colo de este tema y con un director de Universidad Católica. El gerente de Universidad de Chile me llamó -cuenta Jadue.