“The Panama Papers”: Respuesta de CIPER a Hernán Büchi
06.04.2016
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06.04.2016
El ex ministro de Hacienda, Hernán Büchi Buc, emitió el martes 5 de abril un comunicado –que no llegó a la redacción de CIPER– en el que sostiene: “El medio de comunicación electrónico Ciper me ha mencionado como una de las personas que estarían incluidas en los denominados ‘Panamá papers’, como parte de una sociedad offshore, constituida por el estudio de abogados Mossack Fonseca. Al respecto debo decir que esa información no es efectiva, no soy ni he sido nunca cliente de la referida oficina de abogados, ni tengo participación en las sociedades contenidas en esos antecedentes”.
Hernán Büchi se refiere a la investigación de CIPER publicada el lunes 4 de abril sobre los chilenos vinculados a las sociedades en paraísos fiscales gestionadas por Mossack Fonseca (ver reportaje).
Allí se dice que “en los registros del bufete panameño, Hernán Büchi aparece como accionista de la sociedad Compton Investment Inc., registrada en Seychelles en enero de 2011 y cuya directora es la abogada argentina y esposa del ex ministro, María Eleonora Urrutia”. Y se agrega: “La sociedad se abrió a través de las oficinas de Mossack Fonseca en Montevideo, Uruguay, y según los registros aún se mantiene activa”.
Al respecto, debemos puntualizar que entre los 11,5 millones de registros que pertenecen al bufete panameño y a los que tuvo acceso CIPER, el nombre de Büchi y el de su esposa –María Eleonora Urrutia– se mencionan en al menos una docena de documentos que acreditan que Hernán Büchi sí ha participado como accionista de Compton Investments Inc., sociedad de la cual su esposa es la única directora, tal como lo acredita un certificado emitido por la oficina de Mossack Fonseca en Seychelles.
El primero de esos documentos es un correo electrónico, fechado el 9 de febrero de 2011, y lo envía Juan Grasso, del estudio jurídico contable DFG (Dauber Ferrari Grasso) de Montevideo (Uruguay) a la oficina de Mossack Fonseca en ese mismo país.
En ese correo, Grasso escribe: “Natalia: te envío documentos de directora y accionistas. Hoy te confirmo transferencia. Saludos, Juan”. Adjunto a ese correo electrónico, Grasso envió copia de dos pasaportes: el de María Eleonora Urrutia y el de Hernán Büchi. Para resguardar la privacidad de ambos, CIPER no publica las copias de esos pasaportes.
La respuesta de la ejecutiva de cuentas de la oficina de Mossack Fonseca, Natalia Sández, llegó un día después. En el “Asunto” del correo electrónico fechado el jueves 10 de febrero de 2011, se lee: “COMPTON”. “Hola Juan, agradezco me confirmes la siguiente información. 1-. ¿La dirección facilitada corresponde a Hernán Alberto Büchi y a María Eleonora Urrutia? 2-. Confirmar si Alberto Büchi y María Eleonora Urrutia son los accionistas de la sociedad, y si es el caso, cómo se dividirán las acciones. 3-. ¿Requieren que nosotros te proveamos del sello corporativo?”, preguntó Sández.
Una hora más tarde, Juan Grasso respondió en otro correo electrónico: “1-. Corresponde a los dos. 2-. El capital autorizado es de US$50.000. Son los accionistas de la sociedad. Habíamos visto contigo de poner las acciones a nombre de los dos con la cláusula de que si le sucede algo a uno, las acciones le quedan al otro. 3-. Si el sello no es requerimiento legal para trámite de algún tipo no lo requeriremos. Saludos”.
En el mismo set de documentos filtrados del bufete Mossack Fonseca, CIPER encontró dos certificados. El primero fue emitido el 11 de enero de 2011 y certifica que COMPTON INVESTMENTS INC. es una compañía domiciliada en Seychelles (paraíso fiscal), que cuenta con un capital autorizado de US$50.000, “dividido en 50.000 acciones con valor par de US$1.00 cada una”. Asimismo, el documento da cuenta que “María Eleonora Urrutia o Hernán Alberto Büchi con tenencia conjunta y derecho de sobrevivencia, es titular de 50 mil acciones de US$1 cada una” (ver certificado).
El segundo documento tiene fecha 28 de noviembre de 2011 y es un “certificado de incumbencia” de COMPTON INVESTMENTS INC. En él se lee: “Nosotros, Mossack Fonseca &Co. (Seychelles) Limited, agentes registrados de COMPTON INVESTMENT INC. (…) con su oficina registrada en Suite 13, Primer Piso, Oliaji Trade Centre, Francis Rachel Street, Victoria, Mahé, República de Seychelles, certifica que: 1-. La compañía fue incorporada en la República de Seychelles como una compañía internacional de negocios numerada 085280 el 11 de enero de 2011. 2-. El director de la compañía es María Eleonora Urrutia. 3-. Los accionistas de la compañía son: EL PORTADOR -25,000 acciones Certificado No. 1 y EL PORTADOR -25,000 acciones Certificado No. 2. 3-. Capital autorizado de la compañía es US$ 50.0000 dividido en 50.000 acciones con valor par de US$1.00 cada una”. El certificado lo firma Mayka Villarreal, secretaria asistente de Mossack Fonseca & Co. (Seychelles) Limited, agente registrado (ver certificado).
En los registros filtrados CIPER encontró otro documento referido a Compton Investment Inc. Se trata de un certificado notarial emitido por el Notario Cornelius Gregorius Du Toit, de Sudáfrica. Está fechado el 5 de enero de 2012 y en él se lee que el notario “certifica y confirma” que ese día examinó el certificado de incumbencia y determina que los hechos que éste contiene “son completos, precisos y verdaderos”.
En el capítulo chileno de la investigación liderada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), publicado por CIPER el lunes pasado, también se informó que en la sociedad offshore constituida por María Eleonora Urrutia y Hernán Büchi en Seychelles, la esposa de Büchi aparecía como la directora, y que en 2012 esa sociedad tuvo movimientos. En efecto, en los registros del bufete Mossack Fonseca se encuentra una carta enviada el 25 de febrero de 2011 por Natalia Sández, de la oficina del bufete en Uruguay, a Tomás de León, ejecutivo de Mossack Fonseca en Panamá. En ella Sández señala:
“Estamos enviando hoy a través de courier especial el juego de documentos legalizado ante el Consulado de Chile a los efectos de cambiar el nombramiento del DIRECTOR. El mismo debe estar a nombre solamente de María Eleonora Urrutia. También estamos enviando para su corrección registro de directores y acta inaugural. Agradecemos nos confirmen recepción de documentos enviados”.
El segundo cambio que experimentó la sociedad Compton Investment Inc. en 2012 también está registrado. CIPER informó en su reportaje: “En octubre de 2012, la mitad de las acciones de Compton fueron absorbidas por la sociedad Deleo International Corp., con domicilio en Islas Vírgenes Británicas, a la que los archivos de Mossfon identifican como “propietaria de inmuebles fuera de Uruguay”.
En los registros de Mossack Fonseca aparecen varios documentos que dan cuenta de esta transformación. El 11 de octubre de 2012, Juan Grasso, del bufete uruguayo DFG, le envió un correo electrónico a Natalia Sández, ejecutiva de la oficina de Mossack Fonseca en Uruguay: “Espero que anden bien. Necesito transformar a Compton en una sociedad con acciones nominativas. Espero instrucciones y costos”.
La transformación de Compton se realizaría pocos días después. Otro documento del bufete panameño da cuenta que la sociedad Deleo International Corp., con domicilio en Flemming House, Wickhams Cay P.O. Box 662 Road Town Tortola British Virgin Islands, se hizo de las 50 mil acciones emitidas por Compton Investments Inc.
Si bien esa operación está fechada el 17 de octubre de 2012, otro correo electrónico del mismo set de documentos del bufete Mossack Fonseca, aporta un dato interesante sobre este movimiento. El 18 de octubre, Natalia Sández, de la oficina de Mossfon en Uruguay, le escribió a Juan Grasso: “Juan, te llamé recién a tu celular. Corregir: las acciones al portador fueron emitidas el 2011. La fecha de la firma del acta debe decir 17 th day of October, 2012. Requerimos recibir copia del certificado de incorporación y domicilio completo del nuevo accionista (Deleo International Corp.). Favor enviarnos copia del acta en la cual se encuentran los registros contables de la sociedad e información sobre las actividades que la sociedad lleva a cabo”.
El 30 de octubre de 2012, Grasso le respondió a Sández en otro correo electrónico: “Es propietaria (Deleo) de inmuebles fuera de Uruguay”.
Como en los registros filtrados del bufete Mossack Fonseca la sociedad Compton Investment Inc. aparece activa, CIPER contactó a través de una carta enviada por correo electrónico a quien figura en esos registros como la directora de esa sociedad. Así lo hizo con otros 50 directores o beneficiarios finales de las compañías vinculadas a Chile que aparecen en esos registros.
En la carta enviada el 22 de marzo le informamos que “en el desarrollo de la investigación en curso, hemos revisado registros que la identifican como beneficiaria final o directora de una sociedad offshore creada en Seychelles: Compton Investments Inc., sociedad que a su vez ha emitido acciones (50.000) a la sociedad Deleo International Corp.”. Luego de explicarle quiénes participaban en esta investigación, le formulamos cinco preguntas.
A continuación las preguntas hechas por CIPER y las respuestas de la abogada Eleonora Urrutia:
1-. ¿Por qué abrió sociedades en jurisdicciones offshore?
Respuesta: “No soy ciudadana chilena y dado mi estatus no me ha correspondido tributar en Chile en base a mi renta global”.
2-. ¿Abrió a través de sus sociedades cuentas corrientes con bancos en esa jurisdicción?
R: “La sociedad no tiene cuenta bancaria en una jurisdicción offshore”.
3-. En caso de tenerlas, ¿declaró usted sus cuentas a la autoridad fiscal chilena o a otras autoridades similares pagando los impuestos respectivos?
R: “Conforme (2) no aplica la pregunta”.
4-. Si lo hizo, ¿se acogió a la ventana legal que abrió el Ministerio de Hacienda para repatriar capitales chilenos en el extranjero durante 2015?
R: “La norma citada no me es aplicable”.
5-. ¿Continúan activas estas sociedades? ¿Es usted todavía su beneficiaria final?
R: “La sociedad no es una Passive NFFE en los términos definidos en FATCA, OECD y recientemente importados en Chile”.
Al final de la carta enviada por CIPER a la abogada Urrutia, se le señaló: “Estamos, por supuesto, abiertos a discutir cualquier preocupación que usted pueda tener. Estaríamos muy agradecidos si confirmara la recepción de esta carta”.La abogada Eleonora Urrutia no tomó contacto con nosotros y solo se limitó a enviar las respuestas consignadas, agregando algunas consideraciones sobre el tenor de nuestra investigación. Al publicar el reportaje el lunes 4 de abril, incluimos lo esencial de su respuesta. Dado el desmentido emitido por Hernán Büchi, su esposo, estimamos pertinente dar a conocer las opiniones que la abogada dejó allí consignadas:
“Concluyo con algo más relevante a los fines que me parecería está usted investigando. Lo que para usted es a priori ilegítimo – ya que bien indica no es ilegal – como puede ser el caso de poseer un activo en una jurisdicción de las llamadas offshore, para mí no sólo es legítimo sino también de alto valor moral ya que hace a la propiedad y seguridad de las personas y su trabajo. Y confirmo mi impresión cuando veo que Chile se desliza por el camino de la inseguridad, que sumado a actitudes impunes como la suya, terminan después en amenazas, extorsiones, raptos, y más genéricamente en la intimidación a las personas con actitudes patoteriles que en nada contribuyen a la sana convivencia democrática. Desde luego ninguno de estos actuares son bien vistos ni menos permitidos en países del continente europeo, en los Estados Unidos ni en países de larga tradición jurídica como el caso de algunos asiáticos, aunque ciertamente con una base judicial distinta”.
“Por el contrario, lo que para usted es legítimo – chapucear en la privacidad de las personas sin más autoridad que la amenaza de publicar información (incluso se da el lujo de colocar un plazo!) que no es atinente, ni verídica ni consistente – para mí no sólo es ilegítimo e inmoral sino rayano en lo ilegal”.
“Por lo demás, imagino que usted ha tomado las precauciones debidas en el caso para saber que la información que está usando ha sido obtenida de manera legal por usted, su equipo o por los numerosos colegas que menciona la acompañan en esta tarea, y que de ninguna manera se ha cometido un delito o cuasidelito al hacerse de ella”.
“Como testimonio, ya que no tengo certeza que se dará molestia en leer esta respuesta ni me dedicará el tiempo que le he tenido que dedicar a usted y menos confío en su ética respecto de lo que hará con la información que obra en su poder, adjunto copia oculta a profesionales imparciales de mi conocimiento ya que tampoco quiero molestarlos con el asunto sino en caso de ser estrictamente necesario”.
Por último, debemos decir que efectivamente no se le envió carta a Hernán Büchi, tal como él lo señala en su comunicado. Pensamos erróneamente que si bien los documentos de Mossack Fonseca lo identifican a él y a su esposa como únicos accionistas en partes iguales y con «derecho de sobrevivencia» de Compton Investments Inc, bastaba con escribirle a la abogada María Eleonora Urrutia, quien aparece como directora.
Mónica González
Directora de CIPER