Agencia publicitaria que trabaja para PENTA es la que obtuvo más ingresos en elecciones 2013

De todas las empresas que trabajaron para campañas políticas en 2013 y que fueron pagadas con dinero declarado como gasto electoral ante el Servicio Electoral (Servel), la Agencia Larraín Publicidad es por lejos la que obtuvo los mayores ingresos. En total, facturó más de $ 1.570 millones según los registros del Servel. La agencia, que también es conocida como Larraín & Asociados, prestó servicios exclusivamente a candidatos de la UDI, incluyendo a su abanderada presidencial, Evelyn Matthei. Su vínculo con la UDI es tan estrecho como el que también mantiene con el Grupo Penta, cuyos controladores son investigados por fraudes tributarios que incluyen el financiamiento de campañas políticas.

Larraín & Asociados es la agencia publicitaria que históricamente ha contado con la confianza total de los dueños de Penta: Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano. A su cargo han estado las cuentas de las principales empresas del grupo, como Banmédica, ISE-Las Américas, Help, Cuprum (cuando esa AFP aún estaba en manos del holding) y Universidad del Desarrollo (en cuyo control también participan los dueños de Penta y tres de los dirigentes históricos de la UDI).

En paralelo a su trabajo con Penta, la agencia siempre ha estado al servicio de candidatos de la UDI. De hecho, sus ejecutivos trabajaron en campañas que ese partido considera “emblemáticas”, como la de Joaquín Lavín cuando postuló con éxito a la Municipalidad de Las Condes y la que llevó a la  elección de Raúl Alcaíno como alcalde de Santiago. En ambas, los ejecutivos de Larraín & Asociados se desempeñaron en coordinación directa con Carlos Alberto Délano, quien aportaba ideas a los equipos creativos. En 2009, según un artículo publicado por La Tercera el 12 de marzo de ese año, Délano propuso que esa agencia se integrara a la campaña presidencial de Sebastián Piñera, quien es uno de sus amigos más cercanos.

Larraín & Asociados aventaja por más de $600 millones a la empresa que le sigue en el ranking de los que más facturaron en la campaña de 2013. En el segundo lugar de los que percibieron los mayores ingresos durante la contienda electoral, se ubica una sociedad estrechamente vinculada a la Nueva Mayoría: Somae. La Sociedad de Marketing Asesorías y Eventos facturó $935,6 millones, pagados exclusivamente por el comando de Michelle Bachelet, pues la sociedad se creó especialmente para administrar la campaña de la actual Presidenta: fue constituida el 15 de abril de 2013 y el extracto de su escritura se publicó en el Diario Oficial cuatro días después.

CIPER revisó los registros del Servel y examinó los gastos declarados por todos los candidatos que compitieron en las elecciones parlamentarias y presidenciales de 2013. En total, se declararon $51.753,5 millones facturados a empresas que trabajaron en esa contienda electoral. La información nos permitió elaborar el ranking de las diez empresas que más facturaron en esa campaña (vea el detalle de los gastos que facturaron las 10 empresas del ranking).

En el “Top Ten” figuran dos sociedades que trabajaron exclusivamente para la UDI y Evelyn Matthei; dos que prestaron servicios sólo al comando de Michelle Bachelet; dos que lo hicieron tanto para la actual Presidenta como para otros postulantes de la Nueva Mayoría, y cuatro que trabajaron para todo el espectro político.

En la nómina destacan dos cadenas de radios: Bío Bío Comunicaciones S.A. e Iberoamericana Radio Chile (propietaria de radio ADN, entre otras emisoras). También figura una sociedad integrada por Ricardo Farías, el ex administrador de campaña de Guido Girardi, quien fue condenado en 2007 por rendir gastos al Servel con boletas falsas de la empresa Publicam. La nueva empresa de Farías (Lidera Comunicaciones) en la contienda de 2013 prestó servicios al comando de Bachelet, al PS, al PPD, a 12 candidatos del bloque progresista de la Nueva Mayoría (incluyendo a su antiguo jefe, Guido Girardi) y sólo a un postulante de derecha: Frank Sauerbaum (RN).

PUBLICISTAS DE PENTA Y LA UDI

Larraín Publicidad -o Larraín & Asociados- fue la gestora de la difundida campaña de spots de Cuprum en la que aparece el entrenador del Manchester City, Manuel Pellegrini, y que se realizó antes de que Penta vendiera la AFP a Principal Financial Group en 2012.

En la campaña de 2013 la agencia facturó a través de, al menos, dos sociedades. La más reciente, creada en 2012, es Larraín Publicidad Limitada. Esta es la que figura encabezando las facturas por servicios declarados ante el Servel el año pasado. Constituida con un capital de apenas $900 mil pesos, Larraín Publicidad tiene tres socios que participan en partes iguales: Felipe Larraín Melo, director de la agencia; Juan Ignacio Valdivia, director creativo; y Carlos Amenábar Monks, director de arte.

En la misma dirección de Santa María 2800, comuna de Providencia, opera la segunda sociedad que facturó para la última campaña. Más antigua, fue constituida en 1978, su razón social es Larraín y Compañía Limitada. Pertenece al mismo Felipe Larraín, pero en sociedad con su esposa (Silvia Schultz) y sus hijos (Francisco Javier y María Gracia), además de la secretaria de la agencia (Matilde Alonso Perván) y las hijas de ésta última (Matilde María Iriarte y María Luisa Iriarte).

La dos compañías tienden a confundir su nombre, por lo que es frecuente encontrar documentos en los que una aparece con el RUT de la otra y viceversa. En la campaña de 2013 la agencia facturó un total de $1.570 millones: $704 millones por servicios prestados al comando de Evelyn Matthei y $867 millones para la UDI.

Ernesto Silva

Larraín y Compañía Limitada, la sociedad más antigua de la agencia, tuvo una participación menor en la última elección, con una facturación de apenas $5.173.661 y solamente por servicios prestados a la campaña del diputado Ernesto Silva, presidente de la UDI. Silva es sobrino del controlador de Penta, Carlos Alberto Délano, y a través de sus sociedades familiares mantiene acciones -que no consignó en su declaración de patrimonio- en uno de los negocios de Penta para los que también trabaja la agencia de Larraín Melo: Banmédica.

Silva contrató a Larraín & Asociados en 2012 con dineros de sus asesorías parlamentarias y le pagó poco más de $4 millones por “una asesoría de imagen consistente en el diseño de una nueva imagen corporativa, material de identificación y difusión y otras actividades afines a la asesoría publicitaria”, como consta en el portal de Transparencia del Congreso.

SOMAE Y LOS ADMINISTRADORES DE BACHELET

Con $935 millones facturados, en el segundo lugar de las empresas que más dinero recibieron en la pasada elección, se encumbra una sociedad creada especialmente para la campaña de la actual Presidenta Michelle Bachelet. La Sociedad de Marketing Asesorías y Eventos Limitada, Somae, fue constituida con un capital de un millón de pesos y su propiedad se divide en partes iguales entre dos personas que ya habían colaborado en el primer gobierno de la Presidenta: Jonny Heiss Schmidt y José Luis Sepúlveda Zapata, quienes en la escritura establecieron que la duración de la sociedad sería de un año.

Heiss se desempeñó en el Servicio de Impuestos Internos en la primera administración de Bachelet y ahora es coordinador general de tecnología en el Ministerio de Educación. Su socio, Sepúlveda, fue secretario ejecutivo del Sistema Bicentenario Becas Chile y actualmente es director del Instituto de Gestión Pública de la Universidad Central.

Entre las tareas que tenía Somae figuró el pago de honorarios a las personas que trabajaron en la campaña de Bachelet, lo que sumó cerca de $909 millones, según las facturas archivadas en el Servel, entre asesorías y servicios profesionales. En los registros del Servel también aparecen otras facturas de Somae relacionadas con el usufructo de un station wagon por $3,5 millones y con un ítem de “compras para la campaña” por $2,3 millones.

Somae fue creada para gestionar los pagos de la campaña y en los hechos se convirtió en una suerte de administradora de subcontratos a través de los cuales se proveían los servicios requeridos por el comando de Bachelet. La legalidad de financiar, con dinero rendido al Servel, los gastos de una sociedad dedicada a la subcontratación, fue cuestionada por la UDI. Ese  partido anunció que incluiría los antecedentes de esta empresa en la carpeta que iba a entregar a la comisión investigadora de la Cámara que indaga el financiamiento de las campañas.

AVISOS EN RADIO, TV Y VÍA PÚBLICA

En el tercer lugar del ranking se ubica Producciones Cinematográficas Cinemachine Limitada, con una facturación de $890,2 millones. Por la franja televisiva de Bachelet recibió $830,7 millones y los restantes $59,5 millones corresponden a servicios prestados al PS.

El nombre con el cual Cinemachine se presenta al público es Triciclo Films y en su página web se pueden ver los spots publicitarios de múltiples y conocidas marcas nacionales. El socio principal es el cineasta Sergio Pineda Ancieta, quien constituyó esta empresa en el 2004 con su familia, aunque además participa en otras sociedades, como la productora Fábula, que también vendió servicios durante la campaña electoral, especialmente a la Democracia Cristiana, partido al que le facturó $100 millones.

En el cuarto lugar de las empresas que más dinero recibieron en la pasada elección, se encuentra Huerta y Contreras Limitada, que facturó $829,5 millones. Esta es una sociedad familiar formada por Alex Contreras Hernández, su esposa Mónica Huerta Ibarra  y el hijo de ambos, Miguel Ángel. La familia tiene varias sociedades, entre las que se cuentan una empresa de transportes y una inmobiliaria. A nivel público se presentan como Quatro Producciones y tienen un sitio web en el que exponen su oferta de productos publicitarios.

En los datos entregados por el Servel, Huerta y Contreras Limitada aparece facturando principalmente para candidatos UDI, como Ernesto Silva, Evelyn Matthei, Joaquín Lavín y Juan Antonio Coloma. En una proporción menor, también prestó servicios al senador Alejandro Navarro (MAS), al diputado Juan Luis Castro (PS), al Partido Socialista y al Partido Igualdad.

La sociedad tiene varios contratos con la Municipalidad de Colina y apareció vinculada al proceso por desvío de fondos que involucró al alcalde Mario Olavarría (UDI) en 2008. El diario El Líder de San Antonio, de la cadena regional de El Mercurio, informó que, según un peritaje ordenado por el Ministerio Público al Laboratorio de Criminalística de la PDI, la sociedad Huerta y Contreras sería una de las empresas que emitió cheques a nombre de Decsa S.A., empresa de Domingo Soto, el colaborador del alcalde que luego transfería el dinero a la cuenta del edil. Olavarría fue sobreseído.

La quinta empresa con mayor facturación es Paraíso Films S.A., sociedad que realizó spots para la franja de Evelyn Matthei. En el archivo del Servel figura con ingresos por $590 millones, de los cuales la UDI le pagó $500,7 millones y los restantes $89,2 millones fueron aportados por el comando de la ex abanderada de la derecha.

En Paraíso Films tiene participación, por partes iguales, Cristián Espinoza Vergara, quien actúa como gerente general, y Alejandro Molina Ossa, representante legal.

Con una facturación de $412 millones, Procom Publicidad Via Pública es la sexta empresa en el ranking. La compañía cambió de nombre y ahora se llama Clear Channel Chile Publicidad Limitada. Creada en 1976, pasó de manos de la familia Sittler Roig a Ronald Phillips en 1985. Phillips la administró hasta el 2000, cuando tomó el control la multinacional Eller Hondings, fundada por el magnate norteamericano de la publicidad Karl Eller. En el 2014 adoptó el nombre de Clear Channel Chile Publicidad, una de las marcas internacionales de Eller.

El gerente general es el español Jordi Sáez Camacho, quien ha aparecido en algunos medios promocionando el nuevo sistema de transportes de bicicletas de la Municipalidad de las Condes, adjudicado a Clear Channel en una licitación realizada en 2014.

Cuando todavía operaba bajo el nombre de Procom, en 2013, prestó servicios a 28 comandos electorales de todo el espectro político, incluso trabajó para candidatos que corrieron al margen de la Nueva Mayoría y la Alianza, como el presidenciable Marco Enríquez Ominami (PRO) y el diputado Giorgio Jackson (RD).

El séptimo lugar, con ingresos por $499 millones, lo ocupa Iberoamericana Radio Chile, consorcio radial perteneciente al grupo español Prisa (propietario del diario El País y Canal +). La red de Iberoamericana está conformada por 11 emisoras, entre las que se cuentan ADN, Pudahuel, Concierto y Futuro, más 200 estaciones asociadas en todo el país.

Los servicios de Iberoamericana, según los datos del Servel, fueron transversales a todos los partidos, aunque casi la mitad del total facturado corresponde a la sumatoria de la propaganda pagada por la campaña de Michelle Bachelet y el Partido Socialista.

En el octavo lugar está Bío Bío Comunicaciones, con una facturación de $409 millones. La empresa radial, originaria de Concepción, pertenece a la familia Moschiatti. Partió en 1987 con la administración de Nibaldo Moschiatti Mocha y hoy está en manos de sus hijos: Mauro Alessio, Tomás Antonio, Nibaldo Fabrizio, Ezio Livio y Piero Bruno Moschiatti Olivieri. En 2014 la compañía se dividió en dos, quedando la original Bío Bío Comunicaciones y generándose una empresa adicional: Bío Bío Inversiones.

Bío Bío prestó servicios a 62 campañas de todos los sectores políticos. El cliente que desembolsó más dinero fue el Partido Humanista, con $25,6 millones; le siguió el senador Guido Girardi ($23,8 millones) y en tercer lugar se ubicó el derrotado candidato a la reelección senatorial por la Octava Región, Hosain Sabag ($18,7 millones).

 VETERANO DEL CASO PUBLICAM

Ricardo Farías

Con ingresos por un total de $408 millones, en noveno lugar está la Productora Gráfica Andros Limitada, una empresa creada en 1990 por Lucía Bustamante Huerta y Margarita Vera Giusti. En 1997, agregaron un nuevo socio: Gastón Herrera Araya, quien aportó experiencia en el rubro gráfico. Andros se dedica principalmente a la impresión de libros y en la campaña de 2013 confeccionó los calendarios y dípticos de Michelle Bachelet, además de otros productos de propaganda.

Cerrando el ranking, en el décimo lugar, figura una empresa que, al igual que Somae, también nació para la campaña de 2013. La sociedad Lidera Comunicaciones Limitada facturó $408 millones,los que fueron pagados mayoritariamente por partidos y candidatos del bloque PS-PPD, incluyendo a la abanderada presidencial Michelle Bachelet.

Los socios de Lidera Comunicaciones son Alberto Barrera Vergara y Ricardo Farías Vega. Antiguo militante del PS, “Beto” Barrera se ha desempeñado como coordinador territorial de las campañas de Michelle Bachelet y actualmente trabaja como asesor del Ministerio del Interior. Según la página de transparencia de esa secretaría de Estado, Barrera es “asesor en materias programáticas, de contingencia social y política”, y recibe honorarios brutos por $2,4 millones mensuales.

Ricardo Farías Vega fue condenado en 2007 a 541 días de presidio y al pago de 21 UTM por su responsabilidad, como administrador de la campaña senatorial de Guido Girardi, en el fraude por las rendiciones de gastos electorales con boletas falsas de la empresa Publicam. Farías figura también en la nómina de asesores legislativos pagados por diputados del PPD y del PRI con dinero de sus asignaciones parlamentarias. En 2012 facturó $24 millones por sus asesorías a diputados del PPD y $1,5 millón por las que prestó a los del PRI. En 2013 recibió $14,4 millones de los parlamentarios PPD y $771 mil del PRI.

Durante la campaña de 2013, la dupla Girardi-Farías volvió a funcionar: el senador del PPD figura como el segundo mayor cliente de Lídera Comunicaciones, a la que contrató por $82,6 millones, monto que sólo fue superado por el PS, que le encargó trabajos por $110 millones.

Como se ha informado (vea reportaje), Guido Girardi figura en la nómina del Servel como el candidato a parlamentario de la campaña de 2013 de todo el espectro político que recibió más aportes reservados vía Servel: $504,5 millones. El ranking cobra ahora relevancia cuando el estallido del Caso Penta ha revelado en primer lugar que los supuestos “aportes reservados” no son tales pues los candidatos saben cuáles son las empresas que aportan a sus campañas vía Servel.

Guido Girardi

El segundo punto que ha salido a la luz con el Caso Penta y que obliga a mirar estas cuentas bajo otro prisma, es el estrecho vínculo entre parlamentarios y empresarios “benefactores” que pueden verse afectados negativamente por las leyes que se votan en el Congreso.

Cabe recordar que el plazo para que el Servel objetara las cuentas de los distintos candidatos por boletas que no corresponden a trabajos efectuados, entre otros reparos, venció el 17 de noviembre de 2014. No obstante, si hay otro hecho que ha quedado claro en estos meses, es que el Servicio Electoral no cuenta ni con facultades ni con personal idóneo para hacer una real auditoría a los gastos legales de campaña.