COLUMNA DE OPINIÓN
Desplazamiento de los estudiantes en Chile: implicancias para las políticas de salud y educación en el contexto del COVID-19
28.04.2020
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COLUMNA DE OPINIÓN
28.04.2020
Usando datos públicos sobre matrícula y residencia, el autor grafica el desplazamiento de los estudiantes chilenos de educación básica y media en las 16 regiones de Chile. Genera así una herramienta útil para discutir sobre el efecto que puede tener el retorno a clases en la distancia social que es necesaria para contener el Coronavirus. En el caso de la Región Metropolitana, muestra que casi 400 mil jóvenes se desplazan a otra comuna para estudiar. Santiago es la que recibe más estudiantes: 25 mil viajan desde Puente Alto.
Vea aquí el análisis del desplazamiento de los estudiantes en cada región de Chile.
Mucho se ha discutido últimamente respecto a las medidas de distanciamiento social actualmente en vigencia. En particular, la polémica se ha centrado en la conveniencia o no de la suspensión de clases presenciales y el momento de retomarlas. El presente análisis tiene como objetivo arrojar luces a partir de la evidencia respecto al desplazamiento diario de los estudiantes, específicamente analiza de dónde provienen los estudiantes que acuden a los establecimientos de las distintas comunas del país.
Para este análisis, se utilizaron las bases de datos de matrícula que pone a disposición el Ministerio de Educación por medio de su Centro de Estudios y que están disponibles en datosabiertos.mineduc.cl. Se descargaronlas bases de datos de matrícula de los años 2018 y la provisoria de 2019 (ya que las matrículas se consolidan a principios del año siguiente).
Dichas bases de datos contienentanto el registro de la comuna a la que pertenece el colegio donde el o la estudiante asiste como su comuna de residencia. A partir de lo anterior, se pudo establecer comunas de origen y destino del viaje de los estudiantes para graficar sus patrones de desplazamiento en las 16 regiones del país[1].
Una vez calculados los flujos, se utilizó la herramienta PowerBI para poner a disposición de la opinión pública el análisis realizado, elque se encuentra disponible aquí. Adicionalmente también se elaboró un video respecto al funcionamiento de la visualización.
Para ejemplificar cómo esta información puede apoyar la toma de decisiones de política pública, utilizaremos el caso de la Región Metropolitana. Los datos de 2019 muestran en primer lugar que, a lo menos, 394.745 niños, niñas y jóvenes[2] van a un establecimiento educacional fuera de su comuna de residencia.
La comuna de Santiago es el destino que registra un mayor número, totalizando 42.004 estudiantes provenientes en su mayoría de las comunas de Pudahuel (4.190), Quinta Normal (3.416), Estación Central (3.357), Maipú (3.138). Cerro Navia (2.353), Lo Prado (2.233), Pedro Aguirre Cerda (1.882), San Miguel (1.603), Recoleta (1.563), Quilicura (1.447), Renca (1.392), Conchalí (1.376), San Joaquín (1.327), Independencia (1.068) y Puente Alto (1.045). Del total de estudiantes que recibe Santiago, el 40% asiste a establecimientos públicos siendo el 63,2% estudiantes de enseñanza media en cualquiera de sus modalidades. A Santiago le siguen como destino La Florida (24.327), Ñuñoa (22.059) y Providencia (20.733).
Por su parte, la comuna de origen más importante es Puente Alto, desde la cual viajan 25.065 niños, niñas y jóvenes mayoritariamente hacia las comunas de La Florida (9.623), La Pintana (6.153) y en mucho menor grado Santiago (1.045). El 16,15% de los estudiantes que se movilizan desde Puente Alto lo hace hacia un establecimiento público.
Este análisis muestra que, en el contexto de un eventual regreso a clases presenciales, existen dos situaciones que es relevante discutir.
En primer lugar, muchos de los estudiantes deben utilizar el transporte público o escolar para llegar a sus establecimientos. Por lo tanto, nuestros niños, niñas y jóvenes deberán compartir con otras personas pertenecientes a otras comunas de la capital en lugares reducidos donde el distanciamiento social se hace difícil de practicar.
Segundo, la evidencia de los desplazamientos nos indica queen los establecimientos educacionales fundamentalmente de enseñanza media, se mezclarán estudiantes provenientes de comunas con distinto nivel de contagio lo que impediría mantener controlado el avance del virus en determinadas comunas, volviendo ineficaz la estrategia de cuarentenas focalizadas. Esto significa que las decisiones no pueden ser tomadas a nivel comunal, sino de territorios más amplios.
Este ejercicio muestra que las medidas de vuelta a las actividades cotidianas, deberían considerar los patrones de movilidad de trabajadores y estudiantes como parte integral de la toma de decisiones.
[1]Para el análisis se hicieron algunas simplificaciones. En primer lugar, se consideraron solamente viajes dentro de una misma región. En segundo lugar, se eliminaron flujos provenientes de territorios fuera del continente, ya que es poco probable que correspondan a desplazamientos diarios como son viajes desde Isla de Pascual, Juan Fernández y el territorio antártico chileno.
[2]Para los niveles de educación parvularia (de establecimientos educativos educacionales, no incluye jardines infantiles), básica y enseñanza media humanista científica y técnico profesional.
Este artículo es parte del proyecto CIPER/Académico, una iniciativa de CIPER que busca ser un puente entre la academia y el debate público, cumpliendo con uno de los objetivos fundacionales que inspiran a nuestro medio.
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