Con un detallado reportaje sobre irregularidades en la compra de camiones para el transporte de tropas (que involucrarían un sobreprecio cercano a los US$ 2 millones) fue inaugurado en Lima el centro de periodismo de investigación IDL-Reporteros. La iniciativa se concretó esta semana con el lanzamiento de su sitio web.
El siguiente texto es la columna de opinión escrita por el periodista Gustavo Gorriti al presentar el primer reportaje de investigación de IDL-Reporteros:
Ésta es la primera edición de IDL-Reporteros. Lo compone una breve sala de redacción cuya razón de ser es el periodismo investigador. Su misión, en consecuencia, es reportar, investigar, descubrir y publicar los casos y los temas que afectan los derechos, los bienes o el destino de las personas.
Es apenas necesario explicar la importancia del periodismo de investigación para una democracia, especialmente en una con alto índice de corrupción. Ésta –la corrupción– se asocia siempre con la mentira, el silencio, el encubrimiento del robo o del abuso.
Por eso, el periodismo debe ser la herramienta puesta a disposición de los ciudadanos, del pueblo, para fiscalizar a quienes los gobiernan y a los grupos de poder.
En la historia de toda democracia lograda destaca el papel del periodismo independiente en revelar con claridad y fuerza casos de corrupción o injusticia. Una y otra vez, el resultado de esos descubrimientos ha llevado a reformas que mejoraron los índices de honestidad pública y fortalecieron los derechos de los ciudadanos.
La prensa tradicional, sin embargo, se encuentra en una crisis profunda que, salvo excepciones, ha socavado profundamente su capacidad de cumplir hasta con su misión más básica: la de informar. Por diversas y a veces complejas razones, la triste paradoja es que en medio del desarrollo explosivo de la sociedad de la información, las salas de redacción se encogen y dentro de ellas, el periodismo de investigación es el primero en desaparecer.
¿Cómo evitar que el periodismo de investigación se extinga? En las naciones libres del mundo entero hay diversas iniciativas para lograr que aquél sobreviva fuera de los medios tradicionales. Dentro de universidades u ONGs, o como organizaciones independientes. Algunos experimentos han fracasado pero otros resultaron exitosos.
IDL-Reporteros es parte de ese esfuerzo global por rescatar y fortalecer el periodismo de investigación. Somos una pequeña sala de redacción, pertenecemos organizativamente al Instituto de Defensa Legal (IDL), la veterana y prestigiosa institución defensora de los derechos humanos, pero tenemos, como debe ser, total autonomía editorial.
IDL-Reporteros cuenta con el apoyo del Open Society Institute (OSI), cuyo programa de medios es un actor importante en el esfuerzo global por defender el periodismo libre, y, particularmente, el de investigación.
Y así, con la investigación que encabeza la primera edición de este medio, IDL-Reporteros inicia públicamente su trabajo. Si bien no podemos predecir qué tipo de investigaciones, qué suerte de revelaciones lograremos, sí podemos asegurar que empeñaremos nuestro esfuerzo y capacidad enteros en cumplir nuestra misión.
IDL-reporteros: mis felicitaciones y mis mejores deseos para que esta agencia de investigación, ponga a la lluz las irregularidades y los éxitos en el Gobierno peruano. Por lo demás como es posible esta demora en la ratificación del nuevo presidente? ¿Hay una mano obscura detrás. Saludos
rafael | 11.02.2013
Gustavo Gorriti es uno de los mejores periodistas de investigacion en America Latina.
La prensa tradicional, sin embargo, se encuentra en una crisis profunda que, salvo excepciones, ha socavado profundamente su capacidad de cumplir hasta con su misión más básica: la de informar. Por diversas y a veces complejas razones, la triste paradoja es que en medio del desarrollo explosivo de la sociedad de la información, las salas de redacción se encogen y dentro de ellas, el periodismo de investigación es el primero en desaparecer.
