CARTAS: Claves para entender los resultados PISA 2022 en Matemáticas

Señor director:

Los resultados del informe PISA 2022 en Matemáticas destacan tres puntos clave. En primer lugar, Chile se mantiene por encima del promedio de América Latina y el Caribe. Segundo, no se observan cambios significativos en los puntajes en comparación con 2018, a diferencia de la caída de 14 puntos en el promedio de la OCDE entre estos dos periodos. Tercero, los resultados en Matemáticas para Chile, permanecen estancados desde el año 2006. Por otro lado, en junio de este año se presentaron los resultados del SIMCE 2022, los cuales mostraron un retroceso estadísticamente significativo en Matemáticas a nivel nacional respecto a 2018, atribuible, posiblemente, a la pandemia del COVID-19. Surge la pregunta: ¿son contradictorios o complementarios estos resultados? Es esencial considerar las diferencias en el foco evaluativo de ambos instrumentos. PISA evalúa competencias matemáticas a nivel internacional, sin adherirse a currículos específicos. En cambio, SIMCE evalúa aprendizajes basados en las Bases Curriculares chilenas, con una tendencia a evaluar contenidos. Adicionalmente a estos dos hechos, al abordar la comunicación de estos resultados en algunos medios de comunicación, se ha incitado a relacionar los resultados de PISA, la situación en Atacama y la creación de los SLEP. Sin embargo, buscar causas directas entre resultados estandarizados y eventos locales no contribuye a la discusión colectiva sobre la enseñanza y el aprendizaje en nuestro país. Más bien, es preciso reflexionar sobre por qué los resultados de PISA siguen siendo los mismos desde hace más de quince años, por qué no mostramos una baja en los resultados en comparación a lo que sí ocurrió en los países de la OCDE, y qué estamos haciendo para el desarrollo de competencias matemáticas en diferentes niveles educativos. Este enfoque más amplio promoverá una discusión más informada y constructiva sobre los desafíos educativos en el país. De la misma forma en que cuestionamos e interpretamos los resultados de dos pruebas con focos evaluativos diferentes, debiéramos cuestionar las lecturas mediáticas que se derivan de dichos resultados.