CONOCE LO ÚLTIMO DE LA DISCUSIÓN CONSTITUCIONAL EN "LABOT CONSTITUYENTE":
🤖 El poder de las regiones y lo nuevo del sistema político
26.08.2022
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CONOCE LO ÚLTIMO DE LA DISCUSIÓN CONSTITUCIONAL EN "LABOT CONSTITUYENTE":
26.08.2022
Ya estamos a poco más de una semana del plebiscito de salida y este es mi penúltimo boletín, así es que ya me empiezo a despedir. Pero antes, quiero pedirte un favor: si has leído con alguna habitualidad este newsletter necesito que contestes la encuesta que encontrarás justo al final del texto. Así podré saber si te sirvió mi trabajo.
Ahora a lo nuestro. Hoy te hablaré sobre el sistema político y el Estado regional que están en la propuesta constitucional. Aunque dentro de la Convención ambas materias se vieron en comisiones separadas, en realidad están muy relacionadas.
Primero tienes que saber que aunque se evaluaron cambios más radicales al sistema político, como un modelo con inspiración parlamentaria o un Congreso unicameral, finalmente se optó por mantener el sistema presidencial y un Legislativo bicameral. Sin embargo, se introdujeron modificaciones que buscan atenuar el poder del Ejecutivo y al mismo tiempo hacer más eficiente la tramitación de las leyes, entre otras consideraciones.
En un momento la Comisión de Sistema Político llegó a aprobar un sistema unicameral, el que se terminó modificando porque difícilmente tendría apoyo en el pleno, en parte por la oposición de los convencionales regionalistas que integraban la Comisión de Forma de Estado. Ellos ya habían diseñado un modelo de Estado regional que implicaba una fuerte descentralización y reclamaron a sus colegas de Sistema Político por no considerar a las regiones en el trámite legislativo. Se optó entonces por un Legislativo bicameral asimétrico, es decir, uno en que las cámaras no cumplen las mismas funciones. Este consta de un Congreso de Diputadas y Diputados, donde se inician y terminan todas las leyes, con una representación proporcional a la población, y de una Cámara de las Regiones, con atribuciones limitadas y un fuerte énfasis territorial.
En la Cámara cada región tendrá igual número de representantes (al menos tres), lo que hace que desde Aysén a la Región Metropolitana tengan el mismo poder, sin importar la cantidad de habitantes. A diferencia de hoy, en que muchos senadores no viven en las zonas que representan, se exigirá a los representantes radicarse en sus regiones por al menos cuatro años antes de la elección y durante todo el tiempo que dure su mandato.
Según Julieta Suárez-Cao, académica del Instituto de Ciencia Política de la Universidad Católica, esta mayor exigencia de avecindamiento junto con la elección conjunta con los gobiernos regionales y municipales, debiera generar un mayor vínculo de los representantes con sus territorios e incentivar a los partidos a nombrar líderes locales. Coincide con ella la académica de la Universidad de Concepción Jeanne Simon, quien agrega que eso podría incidir en tener representantes que respondan más al territorio que a la disciplina partidaria.
Si bien hay quienes creen que por tener menos atribuciones la Cámara de las Regiones debilita la representación regional, en general los expertos con los que he hablado consideran que la cantidad y amplitud de las llamadas leyes de acuerdo regional es suficiente. De hecho, el investigador del CEP Lucas Sierra estima que en la práctica el Poder Legislativo puede tener un funcionamiento bastante simétrico. “Lo de asimétrico está por verse en la práctica, porque si uno mira la cantidad de materias de acuerdo regional son enormes y tienen el mismo problema que esta propuesta constitucional: están redactadas de una manera súper amplia. Si hay una interpretación generosa y extensiva, que la Cámara de las Regiones va a propugnar porque así sea, es bien parecido a hoy”.
Se trata de un presidencialismo atenuado, un nombre que según la académica de la USACH y coordinadora del Observatorio Nueva Constitución Pamela Figueroa acuñó la Convención Constitucional. A su juicio, la atenuación no se explica por las atribuciones del Ejecutivo, pues mantiene las más relevantes del presidencialismo: el control de los asuntos de seguridad, el poder de proponer el presupuesto y la potestad administrativa de dictar decretos y normas.
Figueroa cree que la atenuación del régimen presidencial se da porque se pasa de un Estado centralizado a un Estado regional. “Yo creo que el presidente atenúa su poder más que en relación hacia el Congreso en su relación hacia los gobiernos regionales o las autonomías regionales, porque en el actual modelo tiene una mayor incidencia en la definición de ciertas políticas. Aunque ahora elegimos a los gobernadores regionales, no se ha llegado a una transferencia de competencias o cierta asignación de funciones. A veces se tiende a pensar que atenuar es que va a tener menos atribuciones y funciones, pero la verdad es que como el poder político es relacional, en relación a otros, a la ciudadanía y a otros poderes del Estado, uno tiene que observar esa relación”, dice la académica.
En la misma línea, Julieta Suárez-Cao menciona que en la descentralización es clave la desaparición de la figura del delegado presidencial, que es el representante del Ejecutivo en las regiones y tiene atribuciones en asuntos de gobierno interior, seguridad pública y emergencias. “Ahora la autoridad electa a nivel regional va a ser claramente la autoridad de la región y el gobierno regional asumirá los poderes de la autoridad nombrada por el Presidente”, detalla.
Aunque en general coincide en las características que atenúan el poder presidencial, Lucas Sierra advierte que la posibilidad de reelección presidencial “podría borrar de una plumada lo atenuado que quiere ser el presidencialismo”. Se trata de una iniciativa controversial, que si bien estuvo en las propuestas de Sistema Político de todos los colectivos de izquierda y derecha, hoy está en todas las propuestas para reformar el texto si es que gana el Apruebo.
No, disminuye, y esa es la característica más mencionada por los expertos para describir la atenuación del poder presidencial. Así lo entiende, por ejemplo, el académico del Instituto de Ciencia Política UC Gabriel Negretto, quien enfatiza que en la propuesta constitucional “hay una clara atenuación de los poderes del presidente en la dimensión legislativa”.
Negretto menciona la pérdida de poder en materias fiscales y de gasto, donde hoy el Ejecutivo tiene iniciativa exclusiva de ley y en la propuesta constitucional comparte iniciativa con el Legislativo, aunque éste de todas maneras necesitará la concurrencia presidencial para que el proyecto pueda aprobarse. También se vería debilitado su poder en materia de veto, pues hoy la Presidencia puede vetar las leyes total o parcialmente y se requiere 2/3 de ambas cámaras para superarlo, mientras que en la propuesta constitucional basta que una mayoría calificada del Congreso de Diputadas y Diputados insista en el texto original cuando el veto es parcial.
“Más que decir que se va debilitando el presidente, yo prefiero decir que va creciendo el Congreso y como consecuencia yo diría que ese balance de poder es más equilibrado”, agrega Jeanne Simon.
Uno de los objetivos de los convencionales al diseñar este modelo era mejorar la colaboración entre ambos poderes del Estado. Las leyes de concurrencia presidencial buscaban, además de empoderar al Legislativo, obligar a una mayor coordinación. Sin embargo, hay bastante escepticismo entre los expertos en que ese sea el resultado y muchos creen que el efecto podría ser el contrario.
“Tú puedes quedar desventajado como gobierno. El problema es que al permitirle al Congreso presentar mociones, éstas pueden ser muy populares pero inviables fiscalmente, lo que coloca al gobierno en una posición muy complicada”, explica Negretto, quien ve con buenos ojos el acuerdo de los partidos oficialistas de restituirle al Ejecutivo la iniciativa exclusiva de los proyectos que impliquen gasto público. También advierte que la propuesta constitucional no hace nada por corregir la fragmentación partidaria, que complica cualquier negociación entre ambos poderes.
Los convencionales optaron por dejar fuera de la propuesta un estatuto para los partidos -de hecho no los nombra, habla de organizaciones políticas- y el sistema electoral, dos elementos que para Pamela Figueroa son clave para saber cómo será la relación entre el Ejecutivo y el Legislativo. “Estamos en la fase de definir quiénes van a gobernar, cuáles van a ser sus funciones y atribuciones, pero nos falta la otra parte que es la más importante, que es cómo vamos a elegir a quiénes van a ocupar ese espacio de representación: sistema electoral y estatuto de partidos”, explica Figueroa.
“Yo le respondería a tu lector que en el fondo todo este entramado nuevo se juega de manera muy importante en una materia que no es constitucional, que es la ley electoral y la ley de partidos. Yo le diría que la estabilidad o inestabilidad del sistema político se juega básicamente por la fortaleza de sus partidos, y si tú tienes partidos débiles y fragmentación vas a tener inestabilidad. Si la ley electoral tiende a la fragmentación del Legislativo, especialmente del Congreso en un régimen presidencial, es receta para la inestabilidad. Si en cambio la ley electoral tiende a formar coaliciones más amplias y menos proporcionales, generas condiciones más favorables a la estabilidad”, me respondió Lucas Sierra, reforzando lo que me había dicho antes Pamela Figueroa respecto a lo clave que será la regulación electoral y de partidos.
En cuanto a la novedad del sistema, Gabriel Negretto me explicó que en general el modelo presidencial de América Latina está inspirado en el estadounidense, que funciona con dos cámaras simétricas. Sin embargo, también me dijo que “no es una regla de oro” y que tanto Bolivia como Uruguay tienen cámaras relativamente asimétricas.
“No hay una relación estrictamente lógica entre tener un sistema presidencial y tener un sistema bicameral perfectamente simétrico. No hay una contradicción ni lógica ni empírica ni funcional. Se puede tener perfectamente un sistema presidencial bicameral con asimetría de poderes entre ambas cámaras», enfatiza Negretto.
Agrega que también existen presidencialismos unicamerales exitosos, como en Costa Rica. Como es un país pequeño, no necesita la representación subnacional o regional que implica una segunda cámara. “El bicameralismo está asociado con la extensión y la complejidad y diversidad poblacional de un país”, dice Negretto, pero añade que los poderes idénticos de ambas cámaras responden a «una asociación histórica que no lleva a ninguna necesidad, no quiere decir que porque el bicameralismo sea asimétrico va a funcionar de manera subóptima al sistema”.
El próximo viernes te enviaré el último boletín sobre el debate constituyente 📥. Y antes de despedirnos, quiero pedirte que por favor respondas esta encuesta sobre mi trabajo 👩💻 y sobre el proceso 🗳️. Te tomará sólo unos minutos. Y a mí me servirá para evaluar mi trabajo y su impacto 🎇. Será una forma de conversar (casi) por última vez.
A casi una semana de que se realice el plebiscito constitucional el financiamiento de la campaña alcanzó los $2.126 millones según los datos del Servicio Electoral hasta el 24 de agosto. Las organizaciones por el Apruebo acumulan $469 millones y las por el Rechazo suman $1.656 millones.
Para que te hagas una idea de la dimensión de aportes realizados para el plebiscito constitucional, en la primera vuelta presidencial del año pasado las donaciones de personas y partidos sumaron $1.500 millones. Y en la segunda vuelta, llegaron casi a $1.300 millones. Es decir, el plebiscito supera a ambas elecciones en este tipo de aportes. Y quedan todavía algunos días para realizar donaciones.
Las mayores donaciones públicas por el Apruebo son de $7 millones que aportaron Paul Ketterer y Sergio Vergara, de quienes no encontré mucha información. En el Rechazo, quien acumula el mayor monto sigue siendo Paola Cúneo, parte del directorio de Falabella, quien ha aportado $33 millones. Le sigue Domingo Cruzat, uno de los directores de Enel, que suma $18 millones en donaciones.
La brecha entre ambas alternativas cambia al comparar el número de aportes recibidos por cada una: de un total de 3.766 donaciones, el Apruebo ha recibido 1.325 y el Rechazo 2.441, un 35% y 65% respectivamente. Así se distribuyen los aportes de acuerdo con los montos donados:
El registro de propaganda para prensa escrita y medios digitales ya llegó a más de $1.248 millones. Un 54% se ha destinado a propaganda digital y el 46% restante a difusión en medios escritos y radiales. En el caso del Apruebo su tendencia es más por los medios digitales, mientras que en el Rechazo la inversión se inclina levemente hacia los medios tradicionales.
¿Estás leyendo el texto de la propuesta constitucional ? 📘 ¿Has oído o leído cuestiones que te generan dudas? ¿Quieres profundizar en algún tema? 🤔 Esta es la última semana 🗓️ en que puedes hacerme preguntas sobre la propuesta constitucional elaborada por la Convención. Voy a darte mi correo electrónico para que me envíes tus preguntas: robotlabot@gmail.com 📥. Y haré todo lo posible por responder tus dudas en el último número de este newsletter, para que votes informada/o en el plebiscito 🗳️ del domingo 4 de septiembre.