Ciper: El periodismo que remece a Chile

En los tiempos de la dictadura envié una serie de artículos relacionados con arte, literatura, televisión, etc.a un diario local privado(" Renacer de Chile") de Angol. Me censuraban gran parte de lo que escribía. En otra ocasión envié una carta a la sección "Cartas" del diario quejándome porque la Municipalidad botaba agua en los prados y jardines de la ciudad con mangueras de 11/2 a 2 pulgadas como nada, en circunstancias que nuestros baños ya no daban más, porque no teníamos agua casi por cinco días. Yo trabajaba entonces siendo Profesor Municipalizado. La carta la envié en pleno mes de enero, estando de vacaciones. El jefe del DAEM(Depto. de Educación Municipal), renombrado Pintor de óleos, Profesor Normalista, enquistado de la derecha pinochetista en la Logia Masónica de Angol, me ordenó visitarlo, por escrito, señalándome que acaso me las estaba dando de Periodista cuando jamás yo había estudiado periodismo y me mostró mi carta totalmente tarjada por él, indicándome que más encima estaba yéndome en contra de mi propio empleador. Le respondí que distinguiera bien una carta de un artículo de prensa, cuestión que se enseña en primer año medio y que menos me podía censurar, porque yo estaba diciendo la verdad de lo que estábamos viviendo muchas familias de la ciudad. Finalmente, publicaron la carta, pero totalmente tijereteada, como era el estilo en ese tiempo. Hoy, no nos tijeretean el discurso a menudo, pero sabemos bien en qué manos está la Prensa en Chile. Yo creo que se salva un poco The Clinic. Además, es tal el control absoluto que han alcanzado en poco tiempo de gobernar que han hecho desaparecer el Diario "La Nación", supuestamente para presentarlo virtualmente, con todas las secuelas virtuales ya conocidas. Finalmente, cuando aparece un medio virtual como CIPER, el que pasa a ser una importante herramienta de información e interacción mediante diversas páginas que se conectan por Internet, pero, no para engañar a la gente sino para informarles objetivamente acerca de todo lo que se esconde en nuestro país como si fuéramos una tropa de ignorantes o gente que no se merece tomarla en cuenta con dignidad, entonces esa hambre de querer ser más libres encuentra un cauce sin duda preocupante para los que tienen todos los poderes del momento. Les felicito sinceramente por ello en nombre, quizá de miles y miles de chilenos que están pensando lo mismo. Gracias a ustedes. Sentí mucho no haber estado en la Feria del Libro, pero buscaré vuestra publicación. Hasta pronto.